Sepublica c^da quince di:is.
'ÈtiMadrid î-í-s,at més;' èa provihcias 12;rs. portri~
••mestrevremitiendd^l'importéeoncétta franca, enlibran¬
zas sobrecorreos á la orden del Administrador.=Lasen-
, ,tregassueltas de las, ploras que,se,publican ,á medio real
cadaunaparalos nuevossuscritores.
ADVERTENCIA.
"
'
Swplicamos d nuestros suscritores
que,'^^cúàríàb:al térmmar cú&lquierà de ios jptazos
de.su abono
no seJuiÜen
endisposición de re}
■ mitir ei
importe de ¿a renovación,correspon-
' dièrífé,
se'sirvari, escribirnos manifestando' si desean.continuar.rècïbieiido
elperiódico
y que-mrémitirdn en^cuanto
puedan la cantidad
res-'pécttiid di finevb abonó.—-Nos bastada Iwnro-
-,sa
gàr.dptía de Su palabra parà sefbirlès cons-
■tantementela
suscriçion
; perodeberá enten¬
derse que
eibuCn orden de la,administración
■
exfye pó ÇònsÍderemòSiPomo su'scritbs d los
■ que en
las. circuns:tapeias.,ip,dic.ada.s dejen de
advertirnos su
resolución.
,'MORAL FACULTATIVA.
,j. j
'
j,.!Ëïjà,v,én"prbfeSo^ Veterinaño de 1':" elase D. Gre- j3j,jgorifl Íjaycia Gál¡ndo/ estat)íééido eh Ca^ de'
ab?jo^,provincia.d,e'Madrid, W sido' rèciehtéffie ' ol-î^Objeto de ¡únaacüsacioni
quealbMtar b.Pedro
delra CastiliQ,-residente
en,é|;migmo, pueblo, fpjniuló
enO'! xniicomiloiGado,inserto enel BçleHn
de.,Veterinari\i.
-ciO Protíablelínétitenuestros lecipreSatendiíán.ya íü-
■'
"ÇUtia'tfolicia d^ suceso:^ qtíe
nosreferimosi
pero¿béfeirítls'
qdé" agraáe«:rá«yiino'' obstaiíte, el queIfesiaj 'pi'éséntèdiò^'dbtnuüos de comentáis y con loda
ta exàcîitùâ"iib'etëëibllj'
'éndñtos dattíS hasta■él'diá!•'!-IM OII,.eoj.ioi·iwift',. lim r'aridui.'Hjj-: •;!. l-t: .■ ■.,l> ■
Se suscribe enMadrid en casa del Adinmistradór doa Juan Tellcz Vicen , calle delDesengaño, niím 18, cuar¬
to tereTO; en las librerías de B.iilly-Bailjiere, calle del Principe, v de Cuesta, callé Mayol-; y
Sh'la litografià
de García yMejí.i, calle,de Atocha; num. 66.=En provinciasen casade,los corresponsales.
existen,-á fin de quejuzguehdonacierto é
imparcia¬
lidad en una cuestión de tanta trascendencia para
los interesadosen ella. >
F.iíel número^íO del Bòlètin dé Veierina7Ía,'tov-
'
respondiente al 30 de acostó ultimo, apareció, Còlno
bonus dicho",
él cotnunicadb siguiente
:■'.'Sres Redactores del Boletdn de p^eterinaria.—-Muy
seôores mios :Me seráde lamayorsatisfacción que Vds.
deíi cabida en su nunca bien ponderado, periódico al siguiente remitido, de-cuya atención quedaré reco#o- cido.
Decuantascarreras científicas yliterariasse eniprcB- denennuestrosuelo, noibayotra queofrezcaunporvenir
masincierto qnela de-Veterinaria, acompañada -de'mas disgustos, detantos actos
anómaio^y hasta, denigrativos,
yprincipalmente cuando jCs
desempeñada
por profesoresque ladegradan hastaelestremo devilipendiar la ciencia yarteque abraza,ymucho
mas'cuando
elquelointenta
liene laprotección paratan siniéstrósprocederes dé per¬
sonas en
quienes'está coilfíálla
laádTfai'nistracron'd'é j^ti-
•cia. A si sucede enelpueblo de la residenciadelque sus¬
cribe cuyoshechos,pasoá demostrar. , , ,
HabiéndoseestablecidoenCarabanchelbajo don Grego- gorio,Garcíay,Cab-ido ,prufespr
yeterinario de li' clase,
paraejercersu profesión,teniendo este,la
degraáante
ba¬jeza depersonarse casa
de.íos
parroquianosque noasiste,ypopmcílio deseducciones injustasy estrañas
alíiombre
! que.poseemoralfacultativa;en una
palabra,
desacreditán-:,dometantocomoel que, mas, paracaptarsela voluntad de
; misparroquianos, y ppr
,último,!consiguiendo
conesfo
la usurpación en la asistencia de aquellos.'Yá aosdn solos la cáfila de prácticos empíricos; como supone iel Sr. Bargallp;en'casonsde-ser tales, losqu,e co-
.metenabusos ybajezas,empero;tam,bien lo hacendos.Te—
> teriirariôs de priníera-clasei.recieatemente autorizados y establecidosj 'yicoittoeste:ca,S|0;iq.ue .tengo el sentimiento
■dedenunciar yla-desgracia de presenciar, habráotroamil
-so -ii;! í.viJ ,o:;íf'ib• ,oci''bÍT ii'dcb.'V;
. .Kciitab j-i-u; di;': ü'' T
.í'Kié-Ví 'AT. !!
EL ECO
periódico de intereses morales y materiales.
•
. REDACTADO POR
D.
flliguel Viñas
yMartí, profesor veterinario de-primera clase, residente
enBarcelona^
yeb I). Juan Tellez-Vicen y
D. Leoncio F. Gallego, alumnos de la Escuela Superior
. de Veterinaria.
AÍÍO I. VIERNES
16
DE,SETIEMBRE DE1855.
KÚM. 17.BI ECO '7
^■esepresentená
mis comprofesores
enla vasta
y«sten-
Mmonarquía espadóla.
No solamente llevo
porobjeto
aj redactarestecomunicado el desvanecerlosperjuicios
que puedantraerconsigo,
tantoá mis intereses morales como
materiales,semejantes dicterios, sique
también lo
trascen¬dentales que sonparalosque
tienen la desgracia de ejer¬
cerlaciencia, pues esponerla cortapisa
para'siempre la
presencia de
hombres
tanmalvados á la esfera veteri
naria.
¿y
es#s>dpsmaries,'justificados
que sean,porqueasi lo
desearla el comunicante, debenquedar impunes? Casti¬
gúense, sentonces, y
nada más^que éhtóhcesr escarinehttí-
riámoslos quetalhiciéramos,pues
solo escojitando medi¬
dasapropiadasal caso,
sabríamos apreciar la ciencia hon-
rathfpór los
hombres eminentes
quetanto
sesacrificair
ensuscscéitosparad^rla laalturaque
le
es suya ymereci¬
da.—Carabanchelbajo 15deagosto
de 1853.—Pedro del
Cmstillo^'
Aeste comunicadosubseguían
las observpciones
■^e insertamos á continuación, suscritas por la Re¬
dacción del Boletín. Dicen
así
:'««Siempre hemosdichoy
repetimos
quelas ciencias
sonantela sociedad,Joquequierensean
los que' las ejercen.
Si laciencia no seaprecia, sielporte
moral facultativo
iteSdtce las palabras de los que
las profesan
,si claman
porquese'ven
desatendidos
ymenospreciados,
yal propio
tiempobuscanclientelapor
medios reprobados enlre hom¬
brespundonorosos,
sin
esperará
quelos particulare.s los
basquen,que esel
verdadero orgullo del hombre público,
Bunca,pormasque se h^ga,
saldrá la veterinaria del fan¬
go en que yace, porque
si
sela eleva
ylimpia
unpoco,la
fttelveb ásumergirendonde antes
estaba,
seael
quequie¬
raelque lohaga,ypertenezca
á la ealegoría alta ó baja
dé laciencia;pero siempre osmas
sensible lo verifiquen
los que debieran soiteneury
afirmar las cadenas para qup
jamás volvieraá
caer y sepresentara á la faz de los labra¬
dores, ganaderosy
pariiculares,
conel brillo
yesplendor
quemuchos
saben darla, haciendo todo género de esfuer¬
zosy sacrificiospor. no
mancillarla.—-Xo Redacción.»
;Ahora bienrD. Gregorio
Garèiâ
yGalindo,
que¬riendo vindicarsuhonradez de
los'públicos
ataques qpeD. Pedro del Castillo lé dirigió, ha procedido
,en
juicio contra éste,
yremiitido á lá Redacción de
Mi Ecolos documentosque
siguen
:Srés.redactóres í/eEt BoobE'tAO'VBTEMsiiiiÁ.
Con estafechatligo álos
del SoMm '-W^F^teririaritt,
lb que
sigue:
•Ensnmímiero240del30 deagòsto
próililàòpasado, in-
'sórtmun remitidode D.
P4diu)
delGastilid ,'''albéitiir-ber-
radorenCarabánébel déabajó;
Vtfepo S Vflii-y á mis
com¬profesores que, re.specto
al citado doc'ühfetotO, se áifvan,
suspender él
juicio dé
subuen '¿riteno'acerca de tantas
çalamniasybajezascomo se
mé "imputan
enlos pocos diás
hace poseo el hodCoso
'titulo de pifofésor reteri-
Bario.
Con >sta fecharecurro 4 la accioñde los
tribunales, '
dáádé'harifáTé-reparacion'y
justicia
paramrhbnor vulnera-
''dú, alúiismo tiempoque el
caetifo: del detaatfctor
;impo-
nifihd'éinélaobl4gacioh'0:ipont4uea
de dar á^dí-i parte del
'Téhdltadó'áeikiitive.ligualmenté
qneiái los snscritores de TObprécíálhe
pcri'ódioo.'—BvS; M; '& S-. B.^Garabanchel.
bajo 7de
setiembre de lt53.»
Sirransq, Pds. Srs. Redactores de El Eco, trasladar es¬
tasliabasá las columnas desuapreciable periódico, para
qué'llegue á conocimiento de sus suscritores.
Carabanchelde abajo 7 de setiembre de 1853.
Gregorio García Galindo.
Sres. redactores de El Ecóde la Vetebinama.
Muyseñores
mios; Sírvanse Vds. darcabidaien
su apre¬ciablepericdico, á la'siguientecopia del juicio'deconct- iiacíon,celebradoconmptivcode losactosdenigrantes que elalbéitar B.Pedro delCastillo, meha imputado en un co¬
municado inserto en el número240 del Boletínde preterí-
naria.
•D. EstébanLopez,alcaldeconstitucional deeste
lugar
de Carabanchel, dftabajo.=Gerlifico: Que en.ó} libro
de
Juiciosdeconciliación, celebrados antemíen el corriente año. se encuentrauno cuyotenorá la letraesel siguiente:
=Juicio,=En el lugar deCarabanchel do abajo á treáde
setiembre demil ochocientoscincuenta ytres, compare¬
cieron ájuicio deconciliaciónante
D. Estéban Lopez,- al¬
caldeconstitucionalde él, delaunaparte D. Gregorio
Gar-
cia Galindo,acompañado de suhombre bueno
1). AUélíno
Benitez, y de 'a otra
I). Pedro del Castillo
,acompañado
delsuyoD. Bonifacio
Isidoro Sauz,
vecinoslos primeros
de este lugar, yel último de
la villa-do Madrid
;deman¬
dandoel primeroal segundopor
las injurias inferidas
enun comunicado inserto en el número,2iO del Boletín de
FeUrinaria, lascuales sereducen, según
aparece-del ci¬
tadocomunicado, á lasuposición yacusación que
hace al
que dice enirpor
tos
casasde los parroquianos que no
asiste, seduciéndolos por medios
injustos
yesírañés al
hoínbrequeposee
moral facultátivá
;usurpando al'comu-
nicaiite la asistenciaque le es
debida,
ydesacreditándole
para captarsela
voluntad de aquellos; concluye el comuni-
eante,lanientándose dequela ciencia
veterinaria
noésté
rodeadadelesplendorque semerece,ipor
ejercitarla hom¬
bres tan malvados endichaesfera
científlcav ELquecell^nte
pidela
reparación de
estasinjurias con arreglo á la léy.
(íontestd el demandadoque,
examinando él conrünithido
éOiila fletencion éimparcialídád'
debida,'nasc haUíMsin- jürtas inferidas
porel que^diee al demandante Galindo;
quqcon este,
señor
notiene antipatía de ninguna clase,
que ni
directa ni indirectamente ha intentado ofenderlo:
que
ePcomunicado tiene el Objéto quése deja ver, díítadi-
carmaslamoralidadenlos'qoe
ejercemla.honrosatíapul-
taddeveterinaria, y lo ha
hecho
porla certeza
queha te¬
nidodelsucesodenunciadoconmengua
de
susintereses,
y lie la
instrucción'en su-profesión qpe qs'lo q"e mas le
haya
afectado
yafectaria á otro cualquier.i en igual caso;
y quesi elsuceso
ha tenido lugar por otra tercera perso¬
naqpese'reserva
manifestar, deja consignado que no ha
sidoel D. Gregorio
Galindo. El sefior.alcalde'yf hombres
buenosespusieron las razones
qué creyeron lío'nteiáwnles
ála
avene.ycía de las partes
eneste juicio, y cdmUl.á'^sar
detoiliind lo
pttcliésén cóiisegúir.'acórdó'su'tneréBdídarlo
pOt
ttírminado y'qué 4 loé'ititei·èlsítdtis·'se"'los.pintea,'le la
'
CfJ)ôttnhh'cértififcacdon de él-,
paraqúé'lisea de'su ideffpoho
doíide"lesconvenga', y lo
firman.s=íistébanitnp^.=:Gre-
gorio
6arcia.=t'edro ded GaetHlo.=Bonito(áDIsidrqiSanz.
' =íiAndrés Abelino BenitçZfPFBscopra de
su-origingl, al
j^que-me
remito do
que,certifico, (Xiaque cqusteAbi^iancia
deldemandanteduy la.preaentéy¡que
firmo
enCarabaijcbel
de abajo iseis
de setiembre de mil ochocientòrs cinctícuta
o.
DE LA VETERINARIA.
y tres.=EBtéban Lopez.=:Está sellada con el de la Al¬
caldía.»
Es'copia.=Carabanchel de abajo 6 de setiembre de 1853,
Gregorio Garda Galindo.
Hasta
aquí
cuantopodemos hoy participar
ánuestrossuscritores. Continuaremos
publicando lo
quearroje
de sí
la tramitación de este espediente, siempre que seacompatible
conla ley vigente deimprenta.
Dijimos
que íbamos á presentar la cuestión sin -comentarios, yasí
lohemoscumplido. Sin embargo
en honor de la justicia y de la
probidad
nos vemosobligados
ádirigir
nuestravoz al Boletín do Teteri- naria, haciéndoleunasbrevesobservacionesyalgu¬nas preguntas sobre dudasquetal vez nos ocurren.
Preguntas.—¿En
quéconsiste, Sres. Redactores del Boletín deVeterinaria,
que no ha aparecido ensu periódico el remitido que con fecha 16 de junio último,
dirigió
á yV. elprofesor
veterinario de i."clase D. José Revascall, y que nosotros insertamos
en el número\k ElEco;mientras queel del al- béitar D. PedrodelCastillonoha sufrido elmenor retraso en su publicación?
¿Cómonosehandignado VV. emitirsu
opinion
espontánea, ni contestarsiquiera,
cuandoEl Ecose ha dirigidoal Boletín enlosescandalosos abusos de albéitares quehemos denunciado y en la ruidosa cuestión dearreglo de partidos; alpaso que no hanvacilado enverter amargas querellascontra los de¬
tractores de la-moralidad profesional, enhechos atribuidos por un albéitar á un veterinario de 1.*
clase, cuyos actos no han creídoVV. pudieran ser falsamente supuestos?
Observaciones—Indudablemente
que si el Bole¬tínha dejadode insertar el remitido del Sr.Revas- cal, cuyo contenido demostrabalainexactituddeun caso de
prioridad
que se hablaabrogado
ridicula¬menteunalbéitar,
indudablemente,
repetimos, que, obrando así, ha ocultado la publicaciónde un he¬cho,
denigrantepara unalbéitar, demerecido honor para un veterinariomuyrespetable.Si elBoletín no ha respondidoá las fundadísimas quejas que porconducto de El Eco han manifestado varios
profesores
veterinarios, atropellados por la reprensible conductadealgunos
albéitaresydecier¬tasautoridadesciviles; si nada
respondió,
tampo¬copodránegar que en estoscasos haensordecido á los clamores de sus
hijos
desgraciados.Siel Boletínha incluidoen sus
páginas,
porotra parte, muchos remitidosque en insulto y menos¬precio de los veterinarios le han
dirigido
losalbéita¬res; si les ha dado cabida, forzosamente hahrá de confesar que su conducta, premeditada ó no,
deja
entrever una desatención hácia los
veterinarios,
unaprotección hácia los albéitares.
Si elBoletínseha extasiadoen reflexiones seve¬
rasá
pr<>pósito
del comunicadodel albéitarD-Pedrodel Castillo, sin detenerse á con-siderar que
podria
muybien serunescrito infundado; convendrá ne¬
cesariamente connosotros en que
ha
incurridoeáuna
ligereza,
quecontrasta notablementecon sure¬sistencia á ocuparse
de
los negocios quepública¬
mente interesan á los veterinarios.
Por último, úo\ Boletín pretendiese
persuáda¬
nos de que se muestra
semíveuíral
en las contien¬das borrascosasque se han agitado y agitanentre veterinarios yalbéitares; nosotros estarem,os en
d
derecho, en la obligación de patentizar su error enorrne, esponiendo á la apreciación de los hom¬bres imparciales y honrados acontecimientos co¬
mentados como el de que hoy nos ocupamos.
Por lo que respecta álas acusaciones deD. Pedro del Castillo contra D. Gregorio GarcíaGalindo, no- dapodríamos decirmaselocuente queloquesedes- prende de la lectura de losdocumentos
preinsertos.
Nos regocijamos en felicitar al Sr., Galindo por Jo
acertadamente que ha puestoá salvo su
honradez;y
leofrecemospublicaren El Eco cuantosdocumen¬
tosorigineestaruidosa delación, énquehemos visto
un ataque
indirecto'
á la clase veterinariaen ge¬neral.
CASTIGO A LOS INTRUSOS.
Habiendo el señorsubdelegado del 2.® distrito de la ciudaddeRarcelona, á instancias muy
repeil·
das de lo,s
professores albéitares
yherradores,
esto-blecidos enSan Martin deProven.spls,D. JuanPa¬
rés, D. Isidro Vallsy D. Melchor
Monteys,
puestoenconocimientodel Excmo. Sr. Gobernador delà
provincia,
queBuenaventura
Roquet, Francisco R*- mirez yCayetano Villaplana,
estaban ejerciendo^
clcompetente título el arte deherrarenel referido
pueblo; S. E.
tuvoá bien disponer,
como medio muy eficaz paraimpedir todaespecie de intrusio¬
nes,loque
viene
espuesto en el oficioqueá conti¬nuación insertamos, y dirigido al alcalde del
pueblo
ya citado.
Gobierno de laprovincia de Barcelona.=E1 subdeleg»-
do deveterinaria del 2.° distrito de estaciudad mo dico
en f.° delactuid, que Buenaventura Boquet, Francisco Ramirez yCayetano Villaplaia se ocupan en herrar «•- ballerias sin elcompetentetítulo. En su cousccueuciahe resueltoque se sirva V. cerrarlessus
tiendas
ylesreco¬ja las lierramientas dosu oficio, exigiendo al|ropio tiem'
po á cadanndde ellos 100 rs. demilia por piiniera vez' yles apercibiráV.que si reinciden serántratados coa n»- yorrigor.=Encargo á
V.
también meparticipe el resolta¬dode estadisposición, y le advierto que êxigiié á V. la
masestrictaresponsabilidad por
i^s contemplaciones
qoe tenga en el cumplimiento de este servicio, asíconiosi
vuelveá toleraren esc pueblo intrusos,de cualquiera fa¬
cultad.=Dios guarde «V. muchos afios.=l!arcelona 16ia juliode 1853.—.Melchor Orduûez;=:Sr. Alcalde de S. Mar¬
tin de Proveusals.
Para hacermanifiestoel celo con que
el s^or
EL ECO- J ; ü
ÒrdoSez'mira
lasclames facultativas,yla'protección qiíè èti particular dispensa ála Veterinaria, bastaba
cdntrasladar esteofició; pfero como
quiera
que,por
personascríticas á la ligera, se haya querido su¬
poner en
el
muydigtío subdelegado de'Yetétinaria,
el Sr. Darder, una
estraliraitacioü de
suSfacultades, abrogándose
otrasqUé únicainante pertenecen á las
áül'orida'des, cúiuplenos
Hacer esta mariifestacion
í)afa disuadir á aquellas,
ydar á cada uno lo que le
jíertenezca.
Gobierno de laprovincia de
Barcelona.=ííúm. 7G0.=
Pordisposición deesta
superioridad
semandó
en2G de
marzolíllimo que so nombrasen inspectores
de
carnesá
losvetérinari'os delós pueblos,y que cesasen los pasto- 'rès úótVaspersonaslegas que estaban
encargadas de la
'ícferidainspección. Algunos
dé
losnombrados junto
con"otrosayuntamientos bab consultado á mi
autoridad si de-
,biantenersueldo, y de quéfondo habia desersatisfecho,
■y para fijar unaregla uniforme en toda la
provincia, he
'resueltoqueelsueldo Ógratificaciónque deben disfrutar
losinspectoresdebe ser'satisfccbo lamitad de los fondos municipales noncargoal artículo de imprevistos, y laotra' mitad por untanto que se exija á los dueños de las reses
que somatenpara el
suministro del público, teniendo
para telle encuentael consumodiario de las mismas,taúto
ma¬yores comomenores.
Los ayuntamientos fijarán por medio de acuerdo, el
haber que convenga señalar
al
inspector,yluego
que lojrerifiquen Jo poudran en mí conocimiento para la oportú»
¿aresolución.-^Barcelona 5deagosto de 18.53.—Melchor Ordonez.
{Boletín Oficial de la
provincia de Barcelona, del
viernes'1-2de-agosto de 1853.)
Muy dignaes
de
notarla atención
con queel
¿Sr, Ordonez
mjra todo
cuantotiene relación
conla
'salud pública. Al cpmpletar
la obra comenzada
por;eliSr. Lassala, bu
dai;lo
muestrasde comprender lo
Hiteresante que es
la,salud pública,
yde
cuantautili-
,(lad sirven, para su
conservación, los conocimientos
veterinarios; Gracias damos áesteilustre gobernan¬
te,cuyo
nombre quedará grabado,
conel de
su an- .tecesor, enla.bistoria de laVtjterinaria española.
—¡Guando
querrá ci destino
quç,comprendidas
tan -acertadasyjustas.medidas
porquien corresponde,
se hagan por
medio de
unaley estensiva á toda la
Península!
Galmno-puntura contra
los aneurismas.—Des¬
files
del año 1832
en queM. Benjamin l'iülips, ci¬
rujano
de Westminster-Hospital, tiabló cíe este
nuevomedio, MM.
IÇeate, Histon, Fetrequín, Vígue-
rie, Estevenet, etc.,
ló han "puesto
enusó con re¬
sultados variados. Los unos hanobtenido
la
coágu-lacion de la sangre
sin manifestar accidente alguno:
los otros, porel
contrario, han conseguido
sudiso¬
lución yvisto
sobrevenir (lolores insoportables, in¬
flamacionesy áveceshasta placas gangrenosas.
Dos jóvenes médicos alemanes,
segúndice M. Ma'g^ig-
pe,
acaban de dar la esplicacion de estas dilerencias
con las
sigüiéntes palabras
:Sise atraviesa unsacoaneurismáticoó la
arteria
de unanimal por dos
agujas
quecorespondan á lofi
dospoloSj'de
unaipjla,; los efectos
sonsiemprejP.are-
cidos; pero laacciónes muy
diferente, cuándo."
s.ecoloca
ta^n,solo
unade ellas
enel saco ó en la arteria
y según la
naturaleza del polo puesto
encontacto
con,la aguja.
Si él polo
positivo éátá
enrelación'con la'águja
implantada enla arteria,y
el negativo
encontacto
conla piel
siguiendo la dirección-del
vaso,la coa¬
gulación
de la
sangre seproduce instantáneauíente,
sindolor de parte del
animal, ni inflartiacioii, til
placas gangrenosas; pero
si
sesustituye el póló co¬
bre alzinc;y
S'ice-vérsa; bé" pródu(ïcn efectos (lianie-
tralmenteopuestos. La
verdad de
estosasertos'vie¬
necoafirnVadafMjr,uuinerosos
esperimentos hechos
enalgunos
perrçs/..
La
círújiá yeterjnljria 'no
es"dé lás.
quementís
partido puédeñ
s'ácardeló arftc'di'éhó. A'si'la -^alyS-
no-pnntufa
podria
ensayarsecontralas hemorragias
rebeldes de.la yaigular-
inflamada, pudiefido,ademas
sacar algun partido para
la. práctica de^algú^ ope¬
raciones, como por
ejííiñplp, la ca3tra(;icn.
Vfsrdádesqiie
'lós áñéúíisinas'sóri bástante rai'os
■enlos animales objeto de
tiiíéStro ' (ístudiój pero sin
embargo, dadocaso que
scpresentébà será conve¬
niente tratarlos por
medio. de, la elcrtriculad galy4-
nina.—(Gazette ujedicalc de Toulouse,),
- , - ,No sin rázoh estañio's clamando por
el eSUulio
de la Física como
preliminar al de Veterinària; yiuès
se veaquí bástante
í/ien demostrada la utilidad in¬
contestable que, en
mil
casosypueden pregarnos
susconocimientos y
sus-mediosT,
y i.MiguelYiSas ,y SIartí.
PATOLOGIA Y TERAPEUTICA.
CLINICA. . ..
;
_{Continuación.) .e/-.
■' í
i)Todôs losvetcnnarirtssé
acordarán inrludablcKi'cÂte
dééstepequeñoy
delgado hacecillo muscular que, desde
'
lacabezadelperonésedirige
oblicuamente íiácia la
grue¬sacuerdatendinosa de los
melÜzós, enmfcdio de la mal
seconfunde por un tendon
cilindrico
muydelicado. Esta
miniatura miolúgica
designada
porBoucgejat-con el nom¬
brede estensor,lateral de
la
caña, y porM. I. Girard pon
ladenominación de
peroneoTcalcaupideo, corresppiide'al
delgado plantar
ó.fémoro-calcanóidco en la especie ,hu¬
mana; constiiiiye una
producclod carnósa, floja, blantíu-
ja,
desprovista de intcrséccioné's ápóneuróticas
,qué en
el cadáverse manifiesta
constableiiicnté
enuu estado de
relajación
escesivo
;tiene subrígen po¥ íibfás- carnosas
del peroné Cutre
las implantaciones del pereneo-i^prcmota-
tarsianoydel
tihio-falSngiâno
; y portnedio de ama ,-es-
: punâon
aponeurótica.muy delicada sc,^adhiero to.davia á
laparto
posterior
ysubre el lado del cóndilo, esterno,,del
fémur; •estjendiéudQscen
.s.rguida ,oblicuamente por áe-
bajo dOíla
apdueurosi.s de lá pfurua
yaírávcsandó per fen-
cima deltibio-falan"ianopara
a'lcanzar'cl grúés'ó téiiáon
del bífémoro-calcénnidee,'con el cualseúiié éíi
él' tertio (losiferiór dél'íray'ectó de esté
,pérd'sin confúl/dirsé'in¬
mediatamente cónél,
j'rtiés íe'k distingue mojf biomdn-
inédio.déicúrial
cihúiiróíd'ebAbierto
á¿ú'ipalso
enél
espe¬sordélasflWasdél tendon deAquiltes;'y-
despuçs de ha-
DE LA VETERINARIA.
ber entrado como cosa do seis lincas en este canal, "és
cuando las' fibras carnosas del peroneo-calCanóideo se continúan porun tendón'delgado, Hasta'el calcáneo: este tendoncitómuy'inanifiesto al principio, va adhiriéndose
mas cadaVez ádas fibras quelérodean, de modo que en el punto de suinserción, esmuydifícil aislarle del ten- dot de lo^ mellizos, cuyas'fibras sé entrelazan con las- del primeró hasta llegar á confundirse.
oEs 'btercsario insislir sobre dos particularidades' anatómicas muy notables,'y sobre las cuales tendremos muy á menudo ocasiónde volver á fijar nuestra consi¬
deración. La primera consiste en el hecho de la rela¬
jación asombrosa del peróiieó-calcarióideo, cuando el miembro 'se halla estchdido: ésta relajaciónestan con¬
siderable, qué el hacecillo muscular forma Una asa
flótante degrande estehsion mientrasquelos demás mús¬
culosquerodean el tibia sebailanen un estado de ten¬
sion cadavérica muyintensa.- He'observado que puede
separarse cerca decnatrdpulgadas de su longitud, de¬
jándole todavía una estension suficiente para poner y itántcner en contacto las súficríicies de- secsioh. La se¬
gunda particularidid quedebomencionar, reside én la direccióndel pcroneo-calcanóideo,en su pasó á través del espesor delténdon dcAquiles: desupuntodeinmer¬
sión , que lo tiehd'etla parteanteriory al lado esterno,
se contórnca háciá dentro, adelántando sucesivamente hastael centrodel tendón quele sirve devaina, y se ter¬
minadespués dedescribirtres cuartos de vuelta espiral,
en medio dela puntadel calcáneo y de la superficie de implantacióndelbifémoro-calcanóideo.
«Todos losanatómicos que'sehanpropuesto estudiar laOrganización humana ó lade los animales, están gene¬
ralmente deacuerdo en atribuir al pequeño músculo de que tratamos, las funciones dé cstensor del métatarse, considerándole porconsiguientecomo c'ongenéreode los
■mellizos. Contodo, y á pesarde laautoridad de estaopi-
^ -
nion unánime
, numerosas consideraciones nos probarán quehastaahoraso han equivocadosobrelos usosdeesta delicadaproducciónmuscular.«Pérlo gineral lós músculosencargados deconcurrir á un soloy únicoefecto, no se encuentran comparativa¬
mente en unadesproporción lan grande devolúmen y de potencia; pero aquí;qué observamos?un pigmeo y un
gigante musculares, que parecen reunidos paraproducir
un resultado en que la acción del uno será casi nula, mientras que el otro estará encargado de la suma total del esfuerzo: la inspección cadavérica ¿no nos dèmlicstra
por otra parte, que, en la estension, el primero séen¬
cuentra cu un estado de relajación cscesiva y fuera del estado desecundar,con sljs mas enérgicascontracciones, el electo resultante de la accióndelos mellizos?en fin, y como "Prueba mas decisiva aun, si' séexamina eljuego fisiolúgicó'de estos órganos, se reconoce que flejiendo fiierterú'érité'la estrcraidacl posterior douncaballo, elpe- roneo-calcauóideo se, encuentra tenso y envarado ende¬
masíahajo los dedosdel Observador,ahpropiotiempoque
"
el tendon de Aquilés esperimenta'una relajación muy marcada; aunque "volviendo lentamente el. miembro á la
estension, se siente pasar progresivamente el pequeño músculo al est.-ulodelaxitud', cunndo el bil'émoro-calca-
"nóideoentra en evidentecoiitracCron.
«Los peroneo y bifómoro-calcanóideos,no son pues; nj puedeutampoco sercongenéreos;ysi esle últimoes evi- ' dentementé elagente de la estension del i««tataTsp',.tlofe
usosrcáTés'del otro; quedan todavía pordeterminar.
•En tòdos loscuadrúpedos, la union de los mellizos,y- delpcrforado, constituyenunapáráto,locomotor músculo- tendinoso muy complexo, en ipielas funciones su'cesiyaa.
ósimultáneas'están subordinadasá consideraciones de es¬
tática yde dimámicade graninterés;:perO;quesin embar- go'son muyestraílaslal objetoqueme;bepropuesto,para, introducidasen estelugar; me battárá tan solorecordap que :estos dos raúsculosi;que nacen de la cavidad escabro¬
sa situada ciicimá del cóndiloesterno deb femur-y;que se ingieren, elunoenla puntadelcalcáneo,,y el otro enilas- parte.s laterales del«eguudo falange, están sobrepuestos-
de talmanera, que, por la desigualdad'desus masas mus¬
culares, ocupanuna.posicioli respeclivamente inversa ála.
desus.pcrciones tendinosas,'(ielsuèrte que el fcmoro.-fa—
langiano,iquoestá situado inmediatamentedebajo del bifé- moro-calcandideo. secontornea de, dentroAfufra,,yvie¬
neá recibir,1a inserción deesteúltimo; estadisposición se manifiesta pcrfectaracnto, cu.·\ndiilosdosmúsculossepro¬
longan por medio de grUéfus'y'fuertes tendones que se abrazan mútmunentc, parasufriruna especie, de torsion parecida á la de una
cucr^.,.
"Cuandoel.perforadose-contrac, y los mellizosperma¬
necenenestado de relajación, producela llexion de lare^
gion digital, mientras que, en sucontracciónsiínultánca,
estosdo< músculos contribuyen á la estension ■delmeta-
tarsosobre eltibia. En eicaso deflexion total-y. comple¬
tadel miembro , las ataduras del fémoro-falangianujge aproximanbástante,porquelas contracciones de süsfibr^s
carnosas, quedan sinacción en la flexión de los falanges;
peroen estecasoelperoneo-falangiauo, cuyospuntosde implantaciónestán porelcontrariodistantes, viene.áproj- ducir loqueá-su congouóreo loes imposible;,de aquíre¬
sulta, que en^ste caso, ,1a porclon superior del cordon tendinoso deeste músculo, seencuentra en.cierto estado derelajación, quehace cambiarsuspuntosde contactocon eltendon delbiféraoro-calcanóidco. Estosepuedo eviden¬
ciar, implantandoh orizontalmente d.' atrás adelante,.un
largo estilete á través de la cuerda formada porlos dos tendones,,encuyocasoseobservará,quelacstreinidad li¬
bre del iüstrumeiito descenderámucho enlaflexion,y a&- ' cendcvá propoccionalmente otrotanto en laestensiou.El esperimento será mas concluyen.to.'todaviaj si sepone.al descubiertoporuñalarga iucisiou.es,tamisma cuerda; pues estableciendo unaescala, se.probará que, enlos diverses movimientos del miembro,-el cambio total de sitio de les dos tendones el uuo.eobre:vl oíro; serán poca diferencia iguala una pulgada.
■Lasola'flexion de la piérná sobrcol musió,'.'Cuando es lle'vada á".susúltimos limites, y ijue lá árticúlacioil del corvejón no'participa en nada óenCasi ruidá déesté nvo-
viinieiito;cambia aun maslas,Condiciones del niéCanismo dequetratamos.'La fosa é-scabrósa del fémur, ((ue dá iin- 'plantaciónálosbiféinoro-caicanóidéóyfemóroTfalangiáHo,
se aproxima entoncesá la puiitá delcalcáneo, resultando de áquí'UBft'Telajacion, qiié porteflotantes en .snsporcio¬
nes tendinosases'tos dosnVúsCülo's'; en esta ciicúnstah'éia.
yla. precedente, es cuándo el peroneo-c.alfcauóidéo, que ñoexistesinoenlas e.speCicSen qtie él aparólo coiúpueslo do losiuelliz,osy.dei
perl'óradò
bá adquirido el máximumde desarrollo ,'entra eii acción , atrayendo bácia ély en la dirección del tibia el doble tendoii de 'cstos dosmús- xulos,.Ocultando"'en lo pbstble la relajación, éibtpidiendo
que osle'órgano fibroso'tart
eómpldAo",
seaomuy flotante.... ". -.Y EL ECO
y,movible; además, destorciendo la cuerda que forman,
debe favorecer el resbalamiento de
los tendones el
uno sobreel otro.•Las consideracionesqueacabo de
desarrollar, adqui¬
rirán nn alto gradode
evidencia, si
seestudia
conaten¬
ción sobreelanimal vivo la acciónde los tres
músculos
yacitados.
Tirando del miembro abdominal fuertemente
hácia atrás, como enla actitudquese le hace tomarpara herrarlos,se percibe distintamente que
la
gruesacuerda
tendinosa delcorvejón, muy relajada, no
está sostenida
mas que porla tension
del peroneo-calcanóideo
quela
corta, haciéndole deseribiruna curva, cuya
convexidad
mira al tibia: deesta manera laimaginaciónconcibemuy bien, que, aniquilando
la acción de
estemúsculo, la
^uesa cuerda
tendinosa de
que nos ocupamos,deberá
po¬nersemovible, floja y ondulante.
(Sécontinuará.)
m nligltc INI
OBSERVACION SOBRE LAPLENTONEDMONIAPUTRIDA.
La medicinaes una ciencia quedebe su sér á los
he--
chos suministrados porla observaciónyla
esperiencia,
se harepetido milveces.Enmedicina elquequiere relatarycoordinar estoshe¬
chos, es preciso que aprenda antes el modo como
debo
hacerlo; y solo despúes que el catedrático le ha
imbuid"
estos conocimientos, es cuando podrá raciocinarysabrá trasmitir una relación fiel y circunstanciada de lo que concibey observa en la práctica.—Decir cuanto se
ob¬
serva , y nada masde lo que se observa, hé aquí una máximaque nuncadebiera perderse
de
vista, mayormenteen loquetoca á puntos de clínicaydé
observación.—Sin
escluircierta elegancia, debe evitarse lo supérfluo en la
redacción de datos clínicos; pueslaparte recreativaque tanta imporlanciamerocp en otrosramoscientíficos,
debe¬
ría, si no desterrarse, negársele al menosla preferencia,
que con tantagenerosidad sele
concede
encuestiones de
medicinapráctica.
Perspicacia, filosofía , exactitud y fidelidad, son las
cuatrodotes enalgun modo cardinales para observarcon fruto la naturaleza, éscudrifiarsusmisteriosasoperacio¬
nesydetallar el órden yarmonía desusleyes, sin apoyo de teorías forzadas, ni de preocupaciones sistemáticas.
De estemodose depositarán snbre las arasde la ciencia preciosúsmateriales
de observación
, tannecesarios
para elevar ásudebida altura el magestuoso edificiocomenza¬doporel anciano de Goos.
Penetrado , cuanto meha sido posible, deestos princi¬
pios,paso á hacer
la descripción de
unaenfermedad,
cuyo estudiomerece, por mas deun coni'epto, la atención de losobservadoies hábilesy de buena fé. Grave y oscuraen suesencia,complexa ea sumarcha y sobre todo des¬
tructora por su naturaleza, tal es la afección que está diezmando,enlapravincia de Gerona los animalesproce¬
dentes de.Francia, y destinados á un servicio activoy
pesado; afecciónquecalifico de Pleuroneumoniapútrida, sinpretensiones de acertarsu verdadero (nombre; pero como he creído deber darleuno,le he señaladoeste, de- jándo al patólogo la libertad de aceptarlo, ó dereem¬
plazarlo porel que mas seadapte á suteoría.
Principio.—La invasion esprontay seanuncia por la disminución del apetitoy por la actitud particular del animaldealargar elcuelloypermaneceró retiradoconla cabezabajay sostenidaporel ronzal, ó apoyada sobre el
pesebre; deadelantar ya
|a
una, yala
otra mano yporelestado
angustioso.^gué
leobliga á cambiar
confrecuen¬
cia deposición: su fisonomíay aspeito
traducen la triste¬
za y elabatimiento ,y en
el modo de andar
sple
reconoceelabandonode fuerzas:latemperaturaesteriqr
del
cuerpqesmenor, y enparticular la desusestremos;
hay sudo¬
resparciales, viscososyfríos,
temblores
enla region
cu¬bital y en la babilla',
ijadeo considerable
,inspiración y
espiracióncortas, y contodo
,el aire espirado
se en¬cuentra como enelestadonormal. Haydolor en la
region
cosíçil , notabledismiiiucion del
murmullo respiratorio
enunospuntos y aumento en otros,
acompañado de
luirui¬
docrepitante, húmedo , bien
manifiesto
enambos lados.
La tos, siexiste, esvara;el pul.<oes fuertey
frecuente,
yla artería dura y tensa; las mucosas,so
presentan in¬
yectadas.
Estos síntomas no duran generalmente mas
de dos á
tres días, cediendo luegoelcampo á otrosnomenos
alar¬
mantes.
Estado.—Viene este caracterizado por una
postración
estremada, ort pnea;frecuenciay
debilidad del pulso, flo¬
jedad:dela artería,
movimientos del
cnrazontumultuosos;
inconstanciadel apetito,y aun su
reaparición
, que noha
dejado de
sorprender
áalgunos albéitares,
que,por lo
general, solo se atienen á las
apariencias
para creeren
una mejoría. Lasmucosas se presentan
infiltradas
;hay
destilaciónnarítica de un color verdoso, con algunases¬
tríasde sangre, yde una
fetidez insoportable
;el
murmu¬llo respiratorio desaparece á
medida
que se acercala
muerte, que por lo
general
acontecedel sesto al sépti¬
mo dia.
En muchos casoshe tenido ocasión de observar pa¬
roxismos nocturnos ,que se repetían cóu tanta n
gulari-
dad, que nodiscrepaban
media hura todos los días; empe¬
zando con lanochedesaparecían á la
madrugada .siguien¬
te.Duranteuuo deestos accesos es cuando el
enfermo
va¬cilando yagitadopnrflna
respiración trabajosa,
acompa–ada deijuejidos, cae para no
levantarse
mas,arrojando
porlasnarices
mucosidades sanguinolentas de color pardo
vinoso ydeun olor
de
gangrenabien
:anifiesto.
Autopsia.—El cadáver viene á corroborar Con sus le¬
siones, lo quelo.s síntomas
durante la vida
mehicieran
presumir :
la Pleuroneumonia pútrida
,con alteración
profunda
de la
sangre.En efecto, si bienesverdad que, en su
principio, la
en- • fermedadsemanifiestabajo la formaflogistica,
comounapleuroneumonia franca
ysimple; si bien es verdad que.el
pulmóny
la pleura
sonlas dos visceras ma.s profunda¬
mente alteradasen suestructura;no es, sin
embargo,
me¬nos cierto quelas
principales lesiones
seencuentran
enla
sangre. Y
sino,
¿porqué el bazo, el hígado y los demás
órganos
parenquimatosos, el sistema venoso, el ventrículo
derechodel corazón, etc., se
hallan ingurji ados de
una sangrenegra, muy crasa,pegajosa é incompletamente
coagulableporelreposo y
enfriamiento, al contrario de lo
que se
sucede
enla pleuroneumonia verdadera y simple?
Por otra parte, el
anonadamiento, de fuerzas
yel estu¬
por,
verdaderos epifenómenos de la enfermedad
,no ha¬
blan bien claro para decirnos, que
el
aparatocerebro¬
espinal, centro
de la sensibilidad
yde la motilidad, r.n lu¬
garde
recibir de la
sangre unalimento estimulante
,se
encuentra como impresionado.por un
narcótico
queale¬
targandosu
acción vital
^escausadel tcastorno dO; todas
lasfunciones?