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2- MARCO TEÓRICO

2.1. Introducción. El periodismo deportivo en la comunidad académica

2.4.2. Feminismo en el deporte

La academia tiene la obligación intelectual de problematizar desde una perspectiva feminista el género en el deporte. El feminismo cuestiona el orden establecido y las estructuras de poder en el deporte (prensa deportiva e instituciones deportivas), que ejercen de bastiones del machismo, y son un agujero negro de la igualdad. Este discurso político feminista se basa en la justicia y analiza la realidad en la que viven las mujeres para tomar conciencia y organizarse para cambiar la sociedad (Varela, 2013). Sólo el 0,5% de los patrocinios comerciales del deporte es destinado a la mujer, mientras que el deporte masculino recibe el 61%91. En España, según el CSD, hasta 4.000 deportistas españolas de alto nivel no han cotizado nunca a la Seguridad Social, aún cobran en negro, las mejores futbolistas ganan 800 euros y la presencia de las mujeres en las juntas directivas no llega al 10%.92 Y el 50% de las mujeres dicen no seguir nunca el noticiario de deportes al no sentirse identificadas con el contenido que se les ofrece.93

Las nuevas concepciones sobre ser mujer y las oleadas de la corriente feminista están repensando y feminizando el deporte. Una clara demostración fue el festival autogestionado TransFemiFestEsportiu, celebrado en 2014 en Valencia. Un acto corporal subversivo para construir un espacio de crítica y reflexión, dirigido a “bolleras, trans, mujeres y otras corporalidades oprimidas por el heteropatriarcado”94. En 2016, la jugadora Izaro Antxia rompió con los esquemas arcaicos del deporte español al

91 Bachelet, M. (2012, agosto 12). La igualdad sigue siendo un desafío. El País. [Disponible en http://deportes.elpais.com/deportes/2012/08/12/juegos_olimpicos/1344798890_583297.html]

92 Mármol, I. (2014, agosto 20). El deporte, agujero negro de la igualdad. El Periódico [Disponible en http://www.elperiodico.com/es/noticias/deportes/deporte-agujero-negro-igualdad-3459995]

93 Pascual, R. (2015, septiembre). La igualdad se queda en el banquillo. TintaLibre, pp.28-29

94 El encuentro TransFemiFestEsportiu empleó el título ‘Juntxs en forma contra el patriarcado’

https://transfemifestesportiu.wordpress.com/2014/08/29/benvinguts-al-blog-del-transfemifest-esportiu-bienvenidxs-al-blog-del-transfemifest-esportiu/

114 convertirse en la primera jugadora transexual de fútbol sala que juega como federada en España. Asimismo, pioneras del deporte rompieron moldes, como Katherine Switzer, la primera mujer en correr oficialmente la Maratón de Boston en 1967, un evento que había sido sólo para hombres. Switzer se pudo inscribir con las iniciales KV Switzer. El organizador detuvo el coche y corrió detrás de ella gritando: “Lárgate de mi carrera y dame esos números”. Finalmente, terminó la carrera en 4 horas y 20 minutos. Cinco años después se permitió oficialmente participar a las mujeres. Un año antes, la también corredora Bobbi Gibb finalizó la carrera de incógnita con capucha y con tiempo sin oficialidad. Más tarde se hizo justicia y se reconoció a Bobbi Gibb como la ganadora femenina de la maratón de Boston de 1966, 1967 y 1968. 95

Son muchas las teóricas feministas, como Judith Butler, que albergan la esperanza de que “las minorías sexuales formen una coalición que trascienda las categorías simples de la identidad, que combata y suprima la violencia impuesta por las normas corporales restrictivas en el marco de los discursos dominantes.”96 Feministas como Butler entienden el Género como una performance: nacemos y según se decide si somos niños o niñas nos enseñan a actuar de una manera u otra, por lo que supone una escenificación. Para la autora norteamericana de Género en disputa, no es posible ninguna revolución política sin que se produzca un cambio radical en nuestra concepción de lo posible y lo real. Sin embargo, estas prácticas subversivas corren el riesgo, según Butler (1999) de convertirse en clichés anestesiantes a base de repetirlos en una cultura en la que todo es mercancía y en la que la subversión tiene un valor de mercado.

Dentro del marco histórico español habría que citar como avance del asociacionismo deportivo femenino al Club Femení i d’Esports, una plataforma avanzada a su tiempo, fundada en 1928 por mujeres de la burguesía catalana con propuestas progresistas y catalanistas. Sin embargo, tenía unos objetivos, producto de la asimilación de sistemas de símbolos de la época (Sentamans, 2012) como los de “modernizar a las jóvenes catalanas con criterios femenino no feministas sin entrar en la exaltación excesiva del

95 Jot Down (2013, mayo 10). Bobbi Gibb y K.V.Switzer corrieron el maratón de Boston. [Disponible en http://www.jotdown.es/2013/05/bobbi-gibb-y-k-v-switzer-corrieron-el-maraton-de-boston/]

96 Butler, J. (1999). Gender Trouble. Feminism and the Subversion of Identity. Nueva York: Routledge

115 esfuerzo muscular que podría llevar al marimachismo deportivo”97 y que sólo se realizarían prácticas deportivas durante el periodo de la juventud abandonando estas tras contraer matrimonio, ya que “el ejercicio solo servía de la base para mejorar la raza, de cara a conseguir madres de familia preparadas”, según la investigación de Luna (1988).98 A pesar de que hoy pueden parecer ideas atrasadas, sus postulados eran revolucionarios para la época y fueron atacados por sectores reaccionarios. Esta entidad femenina dio mucha relevancia a la acción cultural con la ayuda de las escritoras Anna Murià y Maria Teresa Vernet como intelectuales. El club Femení i d’Esports nunca escondió su compromiso social e ideológico y formó parte de la organización de la Olimpiada Popular de Barcelona, nacida como protesta antifascista a los Juegos Olímpicos de la Alemania nazi, y que no se pudo celebrar por el alzamiento militar contra el gobierno legítimo de la República y el estallido de la Guerra Civil.99 Deportistas de otros países congregados en Barcelona para la disputa de la Olimpiada, como Clara Thalmann, nadadora anarquista suiza, se unieron a la lucha contra el fascismo internacional.

En el marco internacional, hasta la Conferencia Europea sobre el Deporte, celebrada en Oslo en 1991 y que terminó en la Declaración de Brighton sobre Mujer y Deporte en 1994, no se trató de estimular de manera conjunta una cultura deportiva que pusiera énfasis en la valoración de las mujeres100. No en vano, las mujeres fueron excluidas de todos los deportes y medio y la vertiente androcéntrica ha ido heredándose con el paso del tiempo como en otros ámbitos de la sociedad (Tamburrini y Tännsjö 2000;

Hagreaves, 2002).

Dentro de la ética y la responsabilidad de las futuras y futuros periodistas deportivos, debemos acogernos a los códigos deontológicos de la profesión y respetar el Manifiesto por la igualdad y la participación de la mujer en el deporte, que insta a los medios de

97 García-Bonafé, M. (1992). Inicios del deporte femenino. En El ejercicio físico y la práctica deportiva de las mujeres (pp. 18-23). Madrid: Ministerio de Educación y Ciencia-Consejo Superior de Deportes-Instituto de la Mujer, vol. 12.

98 Luna, J. (1988). L’Esport. ¿Un miratge de l’alliberament? El Club Femení i d’Esports 1928-1936

99 Mercadal, J. (1998). El Club Femení i d’Esports de Barcelona, plataforma cultural. L’Abadia de Montserrat

100 Declaración de Brighton (1994). [Disponible en http://www.csd.gob.es/estaticos/myd/declaracion-brighton.pdf]

116 comunicación a reflejar una imagen positiva de la deportista y alentar a los patrocinadores para que apoyen al deporte femenino.101

Por tanto, hace falta un cambio de paradigma. Existen datos para la esperanza. La audiencia en EEUU de la final del Mundial de fútbol femenino (25,4 millones de espectadores) fue superior a la final de la NBA (23,4 millones de espectadores).102 En TVE la final de natación sincronizada en la que España se colgó el bronce en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 fue seguida por 3.013.000 espectadores con un 25,4%.103 La final de bádminton en la que Carolina Marín consiguió el oro en los Juegos Olímpicos de Brasil 2016 fue seguida por 2.466.000 espectadores y un 22,6% de share.104

En 2016 cinco jugadoras de la selección de fútbol campeona del mundo (Carly Lloyd, Becky Sauerbrunn, Alex Morgan, Megan Rapinoe y Hope Solo) se atrevieron a dar el paso contra el machismo y ser protagonistas de su propia lucha presentando una querella contra la Federación por discriminación salarial ante la comisión para la Igualdad de Oportunidades en el Empleo. El Senado de Estados Unidos tuvo que aprobar una resolución donde llamó a la Federación de Fútbol a terminar de forma inmediata con la desigualdad en los sueldos dando la razón a las jugadoras de la selección femenina de fútbol en rebeldía. Las jugadoras fueron recibidas como verdaderas heroínas por las calles de Estados Unidos. Sin embargo, las jugadoras a pesar de generar más dinero que los hombres y cosechar más éxitos, cobraban entre un 30% y un 60% menos.

101 Manifiesto por la igualdad y la participación de la mujer en el deporte (2009) [Disponible en http://www.csd.gob.es/estaticos/myd/manifiesto-mujer-y-deporte-def.pdf]

102 BBC Mundo (2015, julio 7) La final del Mundial femenino se convierte en el partido de fútbol más visto de la historia en EE.UU. [Disponible en

http://www.bbc.com/mundo/noticias/2015/07/150707_eeuu_japon_final_futbol_mundial_record_jg]

103 RTVE (2012, agosto 13). Más de 36,2 millones de espectadores vieron los JJ.OO. de Londres en TVE, 82,5% de la audiencia. RTVE. [Disponible en http://www.rtve.es/deportes/20120813/audiencia-tve-juegos-olimpicos-londres-2012/556760.shtml]

104 El Mundo (2016, agosto 26). El podio de la audiencia: Gasol, 'oro'; Carolina Marín, 'plata'; y Nadal, 'bronce'. El Mundo [Disponible en

http://www.elmundo.es/television/2016/08/22/57badebc468aeb244b8b4584.html]

117 La tenista indomable Serena Williams también se ha atrevido a luchar contra la desigualdad económica y salió en 2016 como leona defendiendo a su manada el mismo premio económico para las mujeres que para los hombres, justo después de que el director del torneo de Indian Wells (tuvo que dimitir por el comentario) dijera que las tenistas viven del éxito de los hombres y que debían arrodillarse por el nacimiento de Federer y Nadal. "Ninguna mujer debe estar de rodillas. Las entradas de la final femenina del US Open se agotaron mucho antes que las de la masculina", le respondió la tenista norteamericana, que estuvo más de diez años sin disputar el certamen de musculosa lejos del estereotipo de cuerpo esbelto, sin procedencia de un club de campo y que demuestra que la fortaleza física no es exclusiva de la masculinidad.106 “Dos tercios del trabajo físico en el mundo está realizado por mujeres, que se emplean a fondo en campos y en casa, haciendo las tareas domésticas. Sin embargo, el feminismo tiene todavía la tarea pendiente de reivindicar el derecho de niñas y mujeres al desarrollo de las capacidades motrices como diversión, ya que el deporte es una herramienta para la emancipación de la mujer”, expresa Matilde Fontecha. 107

Las disciplinas deportivas fueron creadas sobre la base de las características fisiológicas del hombre y del patriarcado. Tännsjo y Tamburrini (2000) explican que “la supuesta superioridad masculina en el deporte es probablemente más un mero hecho social que un fenómeno de la naturaleza, ya que apenas existen genes para la inventiva, la sensibilidad, la cooperación, la actitud del juego y el ingenio en el deporte”. Para la investigadora Fontecha se sigue controlando a la mujer a través del deporte: “El deporte es cuerpo, pero todavía no ha sido cuerpo de mujer. El cuerpo de mujer es el que

105 Fraser, N. (2015). Fortunas del feminismo. Del capitalismo gestionado por el Estado a la crisis neoliberal. Traficantes de Sueños.

106 White, R. (2016). Serena. The other side of greatness [Película documental]

107 Abad, I. (2011, julio 22). “Hay que lograr que las mujeres usen la actividad física para divertirse”.

Pikara Magazine. [Disponible en http://www.pikaramagazine.com/2011/07/hay-que-lograr-que-las- mujeres-usen-la-actividad-fisica-para-divertirseentrevista-a-matilde-fontecha-en-y-luego-direis-que-somos-cinco-o-seis/#sthash.QDkXDlq9.dpuf]

118 soporta el peso de la cultura que restringe sus posibilidades corporales y vitales. Se sigue controlando a las mujeres y la batalla feminista se está perdiendo ahí”.108