• Aucun résultat trouvé

D ISPOSITIVO DE ASEGURAMIENTO DE LA CALIDAD : E STÁNDARES PARA CARRERAS DE

Chile se ha propuesto como tema prioritario lograr un sistema de educación equitativo y de calidad (MINEDUC, 2012b), existiendo una directa relación entre este objetivo y la calidad de los docentes, y por ende con la calidad de la formación inicial de estos profesionales.

Esta preocupación por la calidad de la formación y desempeño docente se manifiesta y concretiza a través de los dispositivos de aseguramiento de la calidad del desempeño, como son los Estándares para la FID, el Marco para la Buena Enseñanza, el Sistema de Evaluación del Desempeño Profesional Docente, entre otros. De esta manera el Estado establece un marco para la formación docente mediante normas y criterios que orientan el currículo formativo y son referentes para los procesos de evaluación.

Es así como, en la actualidad, se poseen estándares de contenido que señalan un qué, referido a un conjunto de aspectos o dimensiones que se debieran observar en el desempeño de un futuro docente denominados Estándares orientadores para egresados de carreras de pedagogía. El concepto de estándar, en el contexto educacional, se entiende como aquello que todo docente debe saber y poder hacer para ser considerado competente en un determinado ámbito, para ello se especifican cuáles son los conocimientos, capacidades, habilidades y actitudes que caracterizan al profesional de la educación (MINEDUC, 2012a), permitiéndole lograr una buena enseñanza y que los alumnos aprendan, y de esta forma respondan a las expectativas educacionales y a los requerimientos de la sociedad actual, ya que para aprender a ser docente, o más específicamente, para aprender a enseñar se requiere disponer de una visión amplia de lo que es ser docente, tanto en el aula como en la comunidad educativa de la cual forman parte, y lo que respecta a su propio desarrollo profesional y el fortalecimiento de su profesión (Beca et al., 2011; Gysling y Sotomayor, 2011).

Es importante señalar que el MINEDUC reconoce que los estándares se conciben como una herramienta dinámica que deberá adecuarse a los cambios que en el futuro se vayan sucediendo (MINEDUC, 2012b).

Estos estándares fueron elaborados respetando los siguientes cinco criterios:

 Consideración de la autonomía de las instituciones formadoras. La propuesta de estándares no debe confundirse con un intento de prescribir a las instituciones formadoras de docentes qué saberes y habilidades definidos como necesarios se deben alcanzar y cómo se debe lograr esto, sino únicamente orientar respecto de qué se debe lograr, sin aspirar a una especificación de las condiciones y medios por los cuales los estudiantes de Pedagogía en Educación Básica alcanzarán dichos logros.

 Relación con el currículo escolar y sus objetivos. Un objetivo necesario de la FID es que sus egresados sepan, comprendan y sepan hacer lo necesario para que sus futuros estudiantes logren el nivel de aprendizaje esperado por el currículo nacional vigente. Por lo mismo, los estándares se han elaborado considerando los objetivos de las bases curriculares del sistema escolar y los ejes disciplinarios que lo

estructuran. No obstante, teniendo en cuenta que el currículo y la estructura del sistema educacional están sometidos a continuos cambios, se ha procurado que la especificación de los conocimientos que deban dominar los docentes considere sólo lo esencial y menos variable.

 Foco en los estudiantes del sistema escolar, sus características y modos de aprender. Los estándares se han construido con foco en los alumnos según el nivel educacional parvularia, básica y media, y sus necesidades de aprendizaje, lo que pone el centro en la importancia que los futuros profesores o profesoras conozcan quiénes son ellos, cómo aprenden, qué comprensiones traen al proceso de enseñanza y aprendizaje, cuáles son sus necesidades, su entorno social, y qué los motiva. Asimismo, los futuros docentes deben conocer y ser capaces de aplicar estrategias y/o acciones para favorecer la progresión de aprendizajes y la continuidad metodológica.

 Estándares disciplinarios y pedagógicos. La enseñanza requiere sólidos conocimientos y habilidades en las áreas curriculares a enseñar y dominio de metodologías y recursos didácticos respecto a cómo éstas se enseñan. Los estándares se hacen cargo de esta doble dimensión disciplinaria y pedagógica, ofreciendo a los formadores alternativas para lograr esta articulación fundamental. Es así como unos estándares distinguen los conocimientos disciplinarios que debe lograr el futuro docente, mientras otros describen las principales herramientas pedagógicas para su enseñanza.

 El compromiso del profesor o profesora. Los estándares representan un instrumento clave para el desarrollo de la docencia escolar como una profesión de excelencia. En la base de identidad de ésta, se encuentra el compromiso con el crecimiento intelectual y moral de los estudiantes.

Así, el conjunto de los estándares se sostiene sobre el criterio de que, al compromiso con tal crecimiento, se une el compromiso con el aprendizaje continuo del docente en los aspectos disciplinarios y pedagógicos, la reflexión sobre su práctica, y la utilización de las tecnologías y el trabajo con la comunidad de aprendizaje en la que se desempeñe (MINEDUC, 2012a, pp. 10-11).

Se espera que los estándares sean de utilidad para el propio MINEDUC, las instituciones formadoras de profesores, los estudiantes de pedagogía y los profesionales de la educación en general.

Para el MINEDUC, los estándares serán utilizados como referentes en los procesos nacionales de evaluación de egresados de pedagogía, antes de iniciar su desempeño profesional y para los procesos de acreditación de los programas de formación de profesores, orientando sobre qué esperar como resultado de la FID (MINEDUC, 2012a).

En el caso de las instituciones formadoras de profesores, el MINEDUC señala que los estándares prestan distintas utilidades, sirven como guía, apoyo, orientación y referencias claras sobre los contenidos disciplinarios y pedagógicos que debe saber todo profesor o profesora al finalizar su formación base, para ser competente en el posterior ejercicio de su profesión (MINEDUC, 2012b) y así

similares como un medio para asegurar el mejoramiento de la calidad en la educación: Es decir, deben ser considerados como un instrumento de referencia, puesto que su valor reside en que “informan de una manera precisa y transparente los conocimientos esperados, sin interferir en la libertad académica de las instituciones de educación superior” (MINEDUC, 2012b, p. 4).

Hay que mencionar, además, que los estándares son un instrumento que facilita el seguimiento de los logros alcanzados por los estudiantes de pedagogía, convirtiéndose en referente para procesos evaluativos de carácter diagnóstico y formativo, identificando las fortalezas y necesidades del estudiante para apoyarlo durante su formación inicial y orientar programas de inducción profesional. Las instituciones pueden contar con información que les permita tomar decisiones sobre sus propuestas formativas, comprendiendo que las universidades son autónomas para establecer sus proyectos curriculares, plasmados en los perfiles de egreso, planes y programas formativos, y del sello propio de cada una de ellas, siendo posible desarrollar distintos caminos o trayectorias académicas para que los egresados o titulados logren estos estándares (MINEDUC, 2012, 2012b).

Para los estudiantes y postulantes a las carreras de Pedagogía, los estándares resultarán de utilidad para:

 Tener visión de conjunto sobre conocimientos y habilidades profesionales, como, también, sobre el compromiso moral propios del profesor y profesora.

 Disponer de una referencia sobre lo que se espera de ellos al finalizar sus estudios.

 Comparar, a lo largo del proceso de su formación, lo que han logrado respecto a una referencia (MINEDUC, 2012a).

Finalmente, el MINEDUC (2012a) señaló que los estándares prestan la utilidad para comunicar a la sociedad, y en especial al campo de las profesiones, una visión de cuáles son las competencias que el profesional de la educación debe poseer al ingresar a la de la docencia.

Los estándares se han organizado en torno a dos grandes categorías: (a) Estándares pedagógicos y (b) estándares disciplinarios. Los pedagógicos, son las competencias generales, necesarias para desarrollar el proceso de enseñanza y los disciplinarios, definen las competencias específicas para enseñar en la especialidad de la pedagogía estudiada. Estas dos categorías se articulan y complementan entre sí, con el fin de proporcionar al futuro profesor los conocimientos y habilidades necesarios para el desempeño de la docencia.

La presentación de cada estándar posee una descripción que entrega una idea general de lo que se espera que los docentes egresados conozcan y sepan hacer, y un conjunto de indicadores que desglosan y especifican de qué modo se manifiesta el logro de los conocimientos y habilidades en el ámbito que cubre el estándar (MINEDUC, 2012a). A continuación, un ejemplo.

Tabla 13. Ejemplo de un estándar de egreso para Pedagogía de Educación Media Estándar 1. Conoce a los estudiantes de Educación Media y sabe cómo aprenden.

Descripción

El futuro profesor o profesora conoce las características de los estudiantes en términos personales, sociales y culturales. Sabe cómo aprenden e identifica las características cognitivas, biológicas, afectivas y de los procesos de desarrollo que pueden intervenir en el aprendizaje y sabe que estas características se presentan de maneras muy diversas entre los adolescentes.

Actúa en concordancia con la convicción de que todos y cada uno de los estudiantes pueden aprender y alcanzar las metas que el sistema educativo establece para ellos.

Lo que se manifiesta cuando

1. Conoce los conceptos y principios fundamentales de las diversas teorías de aprendizaje y desarrollo cognitivo, afectivo, social y moral, y sabe utilizarlas para interpretar y diseñar diferentes situaciones de enseñanza-aprendizaje.

2. Comprende la complejidad de los cambios que viven sus estudiantes y las características particulares de la pubertad y la adolescencia, entre ellas, experimentación con la identidad, inestabilidad anímica, sentido crítico, idealismo, por ello asume que tiene un rol formativo como educador y reconoce que ésta es una etapa propicia para la formación ciudadana de los adolescentes y para orientar el desarrollo psicosexual.

3. Relaciona las características del desarrollo de las capacidades cognitivas y metacognitivas, de la madurez emocional y las habilidades sociales de los adolescentes con la promoción de aprendizajes que requieren de habilidades superiores de pensamiento.

Nota: Este estándar tiene nueve indicadores o manifestaciones, de los cuales se presentan como ejemplo los tres primeros. MINEDUC (2012b, pp. 32-33).