el cual se intj'oduceunaválvulade
cobre,
ála
que suautor da el
FOMENTO nombre depéndola, de longitud próximamente igual á la altura máxima delagua eneldepósito. Estapéndola aumentaen diáme¬
tro desde el vértice á la base y va suspendida deun flotador de latón, de modo queal variar la altura del agua pueda subir ó ba¬
jar dentro deloidficio, dejando libre un espaciopor donde pasa el líquido, tantomayor, cuanta menor sea la altura del agua y vice¬
versa.
Haciendoelcálculo del gasto, fácil en este caso por la fórmula Q=m s
\/
2gh, en la cual m es el coeficiente de contracción de la vena líquida, s el área del orificio de salidayli lacarga;siendoH y d los diámetros del orificioy de la péndola, el área del orifi¬
cio de salidaserá la de una corona
cuyos diámetros son D yd, es
decir, s=— —d') y sustituyendo este valor en la fórmu¬
la anterior el gasto vendráexpresado por:
El cálculo de los diámetros de la curva que representa lapén¬
dola puede deducirse fácilmente de esta fórmulasin más que des¬
pejar en la ecuación el valor de d.
Muchos otros módulos se conocen, algunos de ellos usados en
España,perosu descripciónnos llevaríademasiadolejos, sin gran utilidad para nuestros lectore.s.
A. F.
INFLUENCIA DE LOS
BOSQUES EN LA AGRICULTURA
Resumiendo el distinguido agrónomo italiano Dr. Caballero An¬
tonio Alos (i) las diversas influencias que ejercen los bosques enla
economía del globo terráqueo, que unas se relacionan directamente
con la atmósfera ylos meteoros yotras más directamente con el
estado físico de la superficie terrestre,indica las siguientes:
a) Contribuyen á que el airesea más saludable.
è) Regularizan mejor las lluvias.
c) Conservan el preciso equilibrio entre la humedad atmosférica
y la que sostienen viva los manantiales.
d) Impiden los aluviones, manteniendo en una proporción regu¬
lar la cantidad de aguade los ríos.
e) Atraen sensiblemente la electricidad atmosférica.
/) Moderan las temperaturas extremadas.
£■} Entretienenydesvían los vientostempestuosos.
A) Favorecen la licuefacción de la nieve.
t) Contienen las avalanchas y bloques que se desprenden.
l) Fertilizan el terreno.
1. Aire imiysaludable.—Los bosques,aspirandocon su extenso follaje la enorme cantidad de ácido carbónico que contiene la at¬
mósfera, procedente de la respiración animal, exhalación de los volcanes, combustión, putrefacción, etc., yemitiendo oxígeno,
ele¬
mento indispensable parala vida animal, conservan en
el aire el
equilibriode sus elementos, del que depende la ordenada
distribu¬
ciónde los seres orgánicos.
2. Regularidad de lalluvia.—Los bosques conservan
la hume¬
dad atmosférica yregularizan las lluvias. Con su
vastísima sombra
mantienen muy fresco el terreno, y se oponen á
la rápida
evapora¬ción solar; absorben en abundancia el agua oportunamente
distri-(i) Irattatoteorico-praticodiagraria,volumeprimo.—1884..
buidabajo la forma detenuísimovapor que traspira el aire, impiden
que los vientos penetren en el interiory roben la humedad, mien¬
tras que elterreno muy poroso, por estar cubierto de hierbayfor¬
mado de hojas y ramas muertas descompuestas, embebe, retiene y
conserva lahumedad atmosférica. Por esta razón, los bosques in¬
fluyen directamente sobre los meteoros acuosos, para templarsu crudeza y violencia y distribuirlos con más uniformidad ymás ven¬
tajas parala tierra y sushabitantes.
Muchos hechos pueden comprobar esta verdad.
Algunas regiones de Francia, Alemania é Inglaterra, disfrutaban
de lluviasligeras, bien repartidas y muy frecuentes, cuando conta¬
ban con bosques; perohoy que carecen de ellos, observan la lluvia
raravez, y siempre torrencial. La extensa llanura de Lombardía
contabaen otros tiempos doble número de días lluviosos que hoy,
porque entonces estaban pobladas de bosques las montañas quela
rodean. La destrucción de los bosques ha traído la prolongación
del invierno, enperjuicio de la primaveray del otoño, contribuyen¬
do á que el estío sea más seco y ardiente. La Judea, la Greciay gran parte del Egipto, perdieron su fertilidad al desaparecer sus bosques. La Sicilia, por estar desprovista de masas forestales, es árida ytrascurren muchos meses seguidos en el año sin caer una gotadeagua del cielo.
3. Conservación de los manantiales.—Conservando los bosques
lahumedad, y favoreciendo las lloviznas y lluvias moderadas, en
vezde aguaceros que denudan los montes é inundan las llanuras,
se contiene el agua cuando encuentra un terreno poroso,penetra profundamente en él, y constituye el origen perennede muchos
veneros subterráneos, que se ocultan para formar fuentesydeter¬
minardespués ríos.
En losmontes vestidos de vegetación no faltan nunca manantia¬
les; mientras que en los desnudos, pelados ó escuetos, fluyen libre¬
mente las aguas cuando llueve, y se secanpronto. Costantinopla
debe sus manantiales áun bosque próximo, segúnasegura Ganteri.
En la islade laAscensión se secó una fuente apenas se talóun bosque inmediato, reapareciendo en cuanto se volvió á repoblar.
Saussure notó disminución de agua en el lago de Ginebra porla
destrucción de masas forestales en los Alpes. La Sicilia es pobreeti manantialesporque no existen bosques.
♦
LOS BOSQUES EN LA AGRICULTURA 555 4.° Regularizan elcurso de los ríos.—Moderando losbosques
el agua de las lluvias al distribuirlas con igualdad, resulta la incal¬
culableventaja de quelos ríos de las llanuras que alimentan, con¬
servenmejor el caudal quellevan constantementeeri todas las esta¬
ciones-, cuando ocurren frecuentesy devastadoras inundaciones,que
seprecipitancon impetuosidad por los valles. El no acumularse grandes masas de agua en los ríos y torrentes, por impedirlo
los
bosques, no nace solamente de la distribución de las
lluvias, sino
más bien de que,estando porosoel terreno, embebe lamayorparte
del agua y nola deja afluir á los ríos y torrentes,
deteniéndolo
ensu cursolas hojas, ramas muertas y céspedes. En los terrenosdes¬
nudos,por el contrario, frotando el suelo lasaguas y en grancan¬
tidadcorren con precipitación álas partes bajas; por esta
razón el
terrenoabsorbe muypoca y noofrece obstáculos que
moderen
su rápido desbordamiento.Los ríos de América, los más grandes del mundo, no
causaban
daños álas comarcas próximascuando existían en
aquella región
numerososbosques. Destruidos estosúltimos en parte,
los ríos
sedesbordan hoy y originan incalculables perjuicios.
El Pó, el Mín¬
elo, y otros ríos no sedesbordaban taná menudo, antes
de la des¬
trucción de los bosques delos Alpes ydelos Apeninos.
En las
pro¬vincias de Messina, Reggio y Calabria, los torrentes causan
daños
espantosos desde las inconsideradas talas
realizadas
en.los bosques.
Aquéllos nollevan unagota de agua en el estío; peroapenas
llue¬
ve, seacumula de una manera extraordinaria é inundan
los
terre¬nos inmediatos.
5.° Electricidad atmosférica.—Cqh sus altas cimas,
los bosques
vansustrayendo de continuo electricidad
atmosférica; ó bien ésta
se equilibra con la terrestre para impedir la
caída de los
rayosy prevenir las tempestades.6.° Temperaturas extremadas.—Los
bosques, engendrando á
su alrededorun ambiente vaporoso, mantienen