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tL CATASTRO Y LA AGOICULTUBA. w

Dans le document III de la Gaceta Agrícola (páginas (Page 69-72)

Señores:

El objeto de la conferencia de hoyes el exámen de la institución co¬

nocida conel nombre de catastro en sus relaciones con laagricultura.

La cuestión es-de las más importantes que se puedentrataren estesitio,

yyOsientonohallarme á la altura de tan importante cuestión y de la ilustración del digno auditorio que me honra con su atención. Contan¬

do, pues, con vuestra indulgencia acreditada, procuraré exponer los principios de esta importante institución quetodos conocemosmás ó ménos profundamente, perotal vezsin los detalles que ponen en evi¬

dencia la necesidad que ámi juicio existe de que en los países cultosy cuyaagricultura reclama perfección ymejoramiento, yespecialmenteen

nuestropaís, selleve á cabountrabajotan interesantecomo el catastro.

El catastro esel inventario de la riqueza territorial, y en esta defini¬

ción se comprenden las diferentes operacionesque han deconstituirle.

Porconsiguiente, encaminándose átener como fin el inventario de tal riqueza, conviene, á mi propósito decircuatropalabras acercado lapro¬

piedad territorialen general y de la de nuestro país enparticular, y

como se combateporalgunas escuelas la constitución actual de la pro¬

piedad, me parece que noestá fuera deeste lugar indicar algoen contra

deunasteoríastan desprovistas de fundamento. Cuando el linage huma¬

no se habia extendido porlasuperficie de la tierra, siendo la población

escasa conrelación al terreno, los pueblos teníanuna existencia nóma¬

da,setrasladaban de unaparteáotrabuscando la fertilidaddel suelo, ha¬

ciendoen untodo la vidapastoril. Cuando la multiplicación de la espe¬

cie humana hizo necesaria laapropiación delterreno,fué necesariotam¬

bién.que el hombreregasela tierra conel sudor de su frente,que la la¬

braseconstituyendo así la propiedadterritorialsobre la base indestruc¬

tibleysantadel derechoque seadquiere ála apropiación de las riquezas

naturalespormedio del trabajo.

La iconíradicoion á este principio de algunas escuelaseconomistasse

(i) Conferencia agrícola del domingo 29 de Diciembre de 1878, pro nunciadaporel Sr. D. Manuel del Busto,Ingeniero agrónomo.

546 GACETA AGRÍCOLA DEL MINISTERIO DE FOMENTO

fundaen que segúnellas la propiedad territorial es un privilegio, por¬

que la tierra dá unproducto sin necesidad de trabajo, que es la llamada

renta natural del terreno. Esto es un absurdo. Seria un contrasentido suponerqueel queemplea lafuerza del vaporpara mover sus locomóvi¬

les, queel que se apropia de la fuerza del viento para mover sus moli¬

nos, en unapalabra, que todo aquel que se aprovecha de losagentes na¬

turales,goza de unprivilegio. No lo es, por tanto, el aprovecharse de la fuerza natural delatierra, como suponen las escuelas que combato. Si todalasuperficie de la tierraestuvieraapropiada, tendrian algun viso de fundamentotales objeciones;perocOmo hay grandesterrenossin mora¬

dores, pueden acudir á ellos los que carezcande lo que se llama privile¬

gio. La tierra, fecundada porel capital y el trabajo, ha sido mejorada; de modoqueseria injustoque trasde largos siglos y muchas generaciones

que ácostade grandes esfuerzos han llegado á colocarla tierra en bue¬

nas condiciones, sedistribuyera éstaen proporción al número de habi¬

tantes, segúnquieren algunosysegún se trató de hacer en tiempo de la Convención francesa.

Admitidala propiedad dela tierra, es menestergarantizarla de una ma¬

neraestable y segura yespecialmente hoy que sesuscitanestáscuestiones llamadas sociales. La propiedadque estálegitimadaporel trabajo, lapro¬

piedad territorial, que esla más legítima de las propiedades, sien esto caben grados, estámuy expuestaá la rapacidady á la avaricia de aque¬

llos que creen que no esel trabajo la única fuentede lapropiedad, y por

consiguiente es necesario ponerlaal abrigo de todosesos ataques.

La manerade garantizar la propiedadesseñalarlaenel terreno de un

modo fijo, de talsuerte queel que seaosado ámoverlas señales sea cas¬

tigadoseveramente.Todas las leyes han castigado al que mueve los hitos ómojones que separan unatierra deotra. En el Deuteronomioseimpone

la penade maldición á aquélque mude los hitos de unsitio á otro. Los

romanos sefijaron tambiénmuyespecialmenteenestacuestión,y recuer¬

dolasPandectasde Justiniano yla ley de las doce tablas, enlas cuales se

consignan deuna manera minuciosa las condiciones de loscotos que han

desepararlas tierras ylos castigos impuestos á losque conintención da¬

ñadalosmovieran. Solondictótambiénreglas minuciosas sobreesteparti¬

cular.Papiniano, Ulpianoyotrosjurisconsultosromanos,también dieron reglas bastante detalladas acercadel deslinde de laspropiedades;yvinien¬

doátiempos más modernos,en el código Napoltonseestablece quecual¬

quier propietario que quiera deslindarsusposesiones tiene derecho á obligar á los demás á hacerel deslinde.

Este deslindedelapropiedad ruralescompletamente necesario,y espe¬

cialmenteen nuestro país en que, porla índole de lapropiedadylos ac¬

cidentes del terreno, las lindes tienen poca fijeza. Sin remontarnos á tiempos remotos, veamoslas diversas vicisitudes por que ha pasado la propiedad en España.

Enposesión tranquilalos romanos denuestroterritorio, fué invadido

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ésteporlosgodos,conservando parasílas dosterceras partes delterreno

cultivadoy dejando una tercera parteá los romanos, quedando sin re¬

partirgranparte delterreno, comolas dehesas, los prados, etc., siendo

necesario deslindar entónces las propiedades. Posteriormente desapare¬

cieron lasleyes de raza, se permitió el matrimonio entre godos y ro¬

manosyVino á constituirseuna razaúnica;pero despues dela invasion

delos árabes se varió aquella manerade serde lapropiedad,y cuando

severificó lareconquista seconcedió á muchos capitanes, como premio

desus hazañas,parte de las tierras conquistadas;demostrando estas vi¬

cisitudesqueenEspaña la propiedad hatenido una granmovilidad, de

la cualaún se resiente, porque una acción no puede ejercerse durante

muchossiglos sin dejartrasde sírastros indelebles.

Es,pues, necesario deslindar la propiedad deunamanera definitivay

con relación al derecho y nO al hecho de la posesión; pero comola

cuestión de derechoes difícil y complicada, muchosautoresopinan que

es convenientedeslindarla bajo elpunto devista del hecho, el cual des¬

pués, porlaprescripción, se convertirá enderecho;y comoel hecho ha

deinscribirseenlos libros dela propiedad, al cabo deun cierto número

de años,por haberse convertido el hechoenderecho, sehabrá

obtenido

el deslinde bajo este último puntode vista, que esel ideal áque ha

de

aspirarse enlaformación del catastro.

Examinada la cuestión bajo el aspecto que hasta ahora lo hemos

hecho, vamos á verel estado en que seencuentranuestropaís enestos

momentos conrelación al objetoque nos ocupa.

Unade las condiciones más esenciales queha de satisfacer el catastro

es la de conseguirsepormediode él la reparticiónequitativa de losim¬

puestos, si bienno esestalaúnica condición quedebesatisfacer, puesto

que el catastro no debe ser únicamentefiscal, no debe tenerpor

exclu¬

sivo objeto la reparticiónexactade lascontribuciones: podiendo decirse

que esto es un accidente,pero es enrealidad el estímuloen

virtud del

cual los Gobiernosse interesan por la formación del catastro, porque deben procurar que la propiedad contribuya de la manera másjustay equitativaque sea posible. Elcatastrotienecomomisión importantísima

la garantia de lapropiedad,y comoconsecuencia deesto se desarrolla á

su sombrauna pOrcion de establecimientos de crédito, que comolos

Bancos agrícolas,tantos beneficiosproducen.

Bajo el punto de vistade los impuestos, España se encuentra desgra¬

ciadamente en un estado deplorable,, y me expreso así porque tengo

datos para probar miafirmación. Voyá leer algunos de los que obtuvo

la dirección general de Estadística cuando se hacia el catastro

de la

provincia deMadrid:

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Alcobendas : 3.006 530' 613 4.149 2.388 283 624 3.295 854 > 20 Aiavaca 861 19' 48 034 808 15 84 ,901 21 » I 8 Brunete i 3.6M 219 402 1.,^ 75; 183 2.088 * .51 Casarrubaelos ^ 488 » 26' 514 409 9 ,10 .413 m » 18 Dagauzode Arriba...; (1) » » 3.593 1 4.535 942 9 BarajasyRejas ; > 9 3.164' . 1 5.409 1.644 '

Claroes que unasOcDltaciones,tqndiferentesson, no sóIo,un desórden parala administración, sino un gran perjuicio para los pueblos, puesto

que si laocultación fuera uniforme, el perjuicio seriasólo para laadmi- j nistracion; pero como no lo es, según acabamos dever, eset^idente que t

esta diferencia tan extraordinaria en las ocultaciones no pup^e ménos

j

de pesardeuna manera penosísima sobre la contribución territorial. El 1 labradorcuenta la contribución como uno delos gastospara la determi¬

nación de su renta,y comoel precio de los productos notiene más reme¬

dio quevenir á serel resultado de estamisma contribución, epçlaro que si de dos labradores uno.tiene 3 por 190 de recargo yel otro 5 por 1O9, el segundo resulta mucho más recargadq queel primero,y porlo tanto tiene que vender los productos más caros y tendrá,nménos salida; de

modoqueseencuentra en condicipnes económicasmuyinforipres,alque ' tiene el 3 por 190solamente de recargo. Observamos, .pues, bajo este |

punto de vista quela desigualdaddel recargo es unaqondiçion desfavo¬

rableparala contribución. Y esto que vemos enlaprovincia deMadrid,

sucede tambiénenotras, comoyampsáverahora. (Leyó.) ,

PROVINCIA DE .CÓRDOBA.

Superficie segúnlos amillaramientos 901.223

» según el Instituto geográfico 1.372.662

Ocultación 471.439

ósea33 por100.

i

(i) No consignamos el detalle de este términoyel siguienteporno

tenercompleta seguridad más que en las cifras de

los

totales que se ex¬

presan.

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