Concepto de libro de texto

Antes de comenzar debemos dejar claro qué se entiende por libro de texto. En el Real Decreto 1744/1998 (España) se define por libro de texto como el material impreso, de carácter duradero y autosuficiente, destinado a ser utilizado por los alumnos y que desarrolla, atendiendo a las orientaciones metodológicas y criterios de evaluación correspondientes, los contenidos establecidos por la normativa académica vigente para el área o materia y el ciclo o curso de que en cada caso se trate.

57 Si buscamos la definición en el Diccionario de la Lengua Española encontramos:

libro de texto

1. m. libro que sirve en las aulas para que estudien por él los escolares.

Por otro lado, investigaciones llevadas a cabo dentro de esta misma temática proponen otras definiciones. Danisova (2006) numera 4 afirmaciones sobre lo que se entiende por libro de texto (p. 65):

- Una publicación para ayudar al profesor, con un contenido metódicamente adaptado y limitado por el currículum nacional.

- Un medio fundamentalmente didáctico que ayuda a desarrollar un proceso educacional.

- Una producción que integra fuentes de información en el largo plazo, accesibles para todos los alumnos y profesores.

- Un instrumento que colabora a implementar el control y la evaluación del proceso de aprendizaje del alumno.

En esta investigación entendemos por libro de texto aquel que utilizan los profesores y alumnos a lo largo de un curso escolar, en el proceso de enseñanza y aprendizaje de un área de conocimiento (González, 2002; Conejo, Arce y Ortega, 2014).

Todas las definiciones citadas sitúan al libro de texto dentro del proceso de enseñanza y aprendizaje. Como este proceso abarca muchas fases, a continuación situamos el libro de texto dentro del currículo.

Alsina (2000) define cuatro tipos de currículo que se desarrollan en diferentes contextos y lugares. Llamamos currículo oficial al conjunto de documentos oficiales propuestos por las autoridades educativas que elaboran los programas de las diferentes asignaturas, señalando los contenidos, objetivos, criterios de evaluación, etc. El currículo potencial esta determinado en diversas publicaciones docentes y materiales como pueden ser los libros de texto. En tercer lugar, el currículo impartido es el que desarrolla el profesor a lo largo del curso y, por último, el currículo aprendido es el adquirido por el alumnado.

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Ahora bien, Foxman (1999) recoge un modelo de currículo formado por tres niveles y que es adoptado por el TIMSS. Estos tres niveles están centrados en el sistema educativo, el colegio y sus aulas y el estudiante. Estos tres niveles son: el currículo previsto o planeado, el currículo implementado y el currículo conseguido. El currículo previsto o planteado es aquel que aparece en los documentos oficiales, el currículo implementado es aquel que tiene lugar en el aula y, por último, el currículo conseguido es el relativo al conocimiento, las habilidades, la comprensión y las actitudes demostradas por el alumno y que han adquirido en clase o por otros medios (Foxman, 1999). Este modelo recogido por Foxman (1999) se asemeja al propuesto por Alsina (2000) pero sin tener en cuenta el currículo potencial. Ahora bien, este autor (Foxman, 1999) pone de manifiesto que los libros de texto juegan un rol dentro del currículo planeado e implementado y, por tanto, sirve de intermediario para implementar las intenciones institucionales (Foxman, 1999).

Van Dormolen (1986) señala que hay distintos tipos de libros de texto. Existen libros de texto que contienen exclusivamente problemas o ejercicios y que no contienen explicaciones, reglas, generalizaciones, etc. En este tipo de libros de texto los teoremas, las definiciones o las demostraciones deben ser realizados por el profesor o por el estudiante con la ayuda, o no, del profesor. Otro tipo de libro de texto es aquel que contiene explicaciones, generalizaciones, reglas, etc. y que cuenta con el desarrollo del contenido por un lado y los ejercicios y problemas por el otro. En este tipo de libro, las explicaciones y los problemas o ejercicios están perfectamente separadas. Por último, están los libros de texto que son una mezcla de estos dos anteriores donde las observaciones, aclaraciones, generalizaciones, reglas, etc. están intercaladas con problemas, ejercicios u otras tareas.

Los libros de texto analizados en este estudio se encontrarían dentro del último tipo descrito por Van Dormolen (1986) puesto que se va intercalando los problemas o ejercicios con definiciones, reglas, ejemplos, etc.

Por otro lado, González y Sierra (2004) realizaron un análisis de libros de texto que les permitió clasificarlos en las siguientes modalidades:

1. Expositivo: En estos libros de texto el conocimiento matemático es un conjunto de enunciados, reglas y procedimientos aislados y relativamente inconexos y desconectados de la realidad. Ahora bien, tienen una estructura prescriptiva donde

59 se parte de las definiciones de los conceptos, se deducen teoremas y se presentan algunos ejemplos.

2. Tecnológico: En este tipo de libros de texto la matemática esta entendida como una organización lógica de enunciados, reglas y procedimientos aplicables a distintas situaciones. En particular, se hace más énfasis en la memorización de reglas que mas delante de aplican en ejercicios o problemas. Las ramas de las matemáticas aparecen desconectadas.

3. Comprensivo: Estos libros de texto comprende la matemática como un instrumento para interpretar la realidad. El tipo de enseñanza promovido es la del descubrimiento permitiendo la construcción de redes conceptuales. Los conceptos matemáticos emergen de situaciones reales que dan lugar a la construcción de conceptos y reglas.

Chamorro (2001) recoge que tanto las unidades de medida usuales como el conocimiento y el uso de instrumentos de medida comunes que han estado siempre incluidos en los currículos a lo largo de diferentes épocas.