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Texte intégral

(1)

AÍiO II. VIERNES

25

DE AGOSTO DE

1854.

NÚM.

41.

sssasssssa»

ei D M u Bum.

PERIODICO DE INTERESES MORALES Y MATERIALES.

REDACTADO POR

(D. 'ïîligMcf ^

,

(3). ^ (D. £couew S". (^aUe^^,

SE

PUBLICA TRES VECES AL MES.

PRECIOS DESÜSCRIGION.—En Madrid, por un mes,

3

rs por tres

id 8. Enprovincias

, portres

id. 1#. UI-

trsiïiiiry 6strcin''6P0, porun sfio*

5t).—PÜüÍTOS DE SÜSLiRIdON.*^Eii Madrid: En lu Rodsccion, Plszunlsi d6 SdD

Ildefonso, número I, cuarto cuarto; enlalibreríade Cuesta o en

la de Bailly—Bailliere

, y en

la litografia de Mejia,

calle de Atocha, num. 82.=:Eaprovincias en casa

de los corresponsales

en

los puntos

en que

los hay, ó girando

etra sobre correos á favor delAdministrador, U, L. F. Gallego, encarta

franca.

Prometimosen uno de nuestrosúltimos números

ocuparnosdeese

pensamiento

quetan

halagüeño

se presentaal

buen

deseo de

algunos dignos profeso¬

res,que ávidos de! bienestar denuestra

clase,

care¬

cenno obstante de los mediosde

investigación in¬

dispensables cuando

se

quiere

tenerun

conocimiento

exacto de las cosas. Hablamos de la anunciada formación deun comité veterinario,querepresente

al gobiernonuestra situación

tristísima, é implore

de su poderosovalimiento la protección que

tantos

añoshace venimos

suplicando.

La idea es, efectivamente, tan seductora, y se encuentra tan

apoyada

por el aparente

éxito

que

ba obtenido el comité de los profesores de

me¬

dicina; que con

diñcultad

desistirán de

ella los

que, cansados de sufriry deesperar,miranen

semejante pensamiento

un

término

feliz á sus

angustiosos afa¬

nes. Asi que, don

Serapio Marin, principal

entu¬

siasta, como autor que es

del

proyecto

á

que nos referimos, vecon disgusto como se pasan

los

pre¬

ciososmomentos que debieran destinarse ásureali¬

zación; y nuestro

antiquísimo

colega, el

Boletín^

sinduíia porsu acendradoamor á los veterinarios, ha legado hastaá formarse la ilusión deque su

hija primogénita,

la Sociedadde medicina veterinaria de

España (q.

e. p.

d.). de

que ese gran parto de su fecundo

entendimiento,

erael mismo comitéen su

esencia.

Peto

dejando

á un ladò las creencias

no

CRBehgias) del Boletín,

pues que de ellas ya

dijimos

algo enotraocasión, conversemos

amigablemente

unosmomentoscon el señor Marin, para emitir

nuestrojuicio enelasunto.

Nosotros partimos del

principio

de que un co¬

mitéveterinario, talcomolo concibe el señorMa¬

rin, que se

propusiera desempeñar

una misióntan noblecomola que le asigna, seria una escelenfo institución quehabría desacarnosá seguro puerto, porque

cuando

se trata

de

unaciencia tan descono¬

ciday tancapaz

de

reportar utilidades inmensas A lapatriacomo

la

veterinaria

¿quién

podrá dudar dq

lo convenientequeseriaenviar cerca del

gobierno

delanación, hombres quele

instruyesen

sobre la marcha que se necesitaseguir enbeneficio del

pais,

para

premiar

nuestros

desvelos

y en concordanria

conlos progresosde la civilizacióná quefelizmente

vamosasomando.

Mas tampoco

ba

deponerse en tela de juicio la

atendiblecircunstancia de que, por la gravedad 4

importancia

deSucometido, reuniesen variascon- dicionesque, enfuerza deser delicadas y

difíciles^

concurrenraramenteenlossugetos.

Se

requiere

forzosamente que los individuos

electos posean una instrucción bastante estensay

profunda,

sinohan de aparecer ante los ministros de lacorona como

indignos de

la

profesión

á

quien

representan. Es asimismo. necesario que gocen de

cierta

posición

socialque

les permita

algunas rela¬

cionescon el

gobierno

; porque, de lo contrario, muy

probablemente desempeñarían

unpapel harto

ridículo. Deberían también bailarse positivamente

enteradosde los malesque

afligen

á la ciencia y4 la

profesión (tanto militar

como

civil),

y sentirlos bien decerca, enel alma,,para

podeiiesponerlos

con

esa verdad y esa

energía

que caracterizan i los oradores que

hablan

con elcorazón, no á los char¬

latanes deoficio, conocidos y

despreciados

por su

palabrería insulsa

y

afectada.

Es

igualmente

indís-

jiensable

queconsten al

público

veterinario como

ñombresprobos,

amantes ycelososde la prosperi¬

dad desus

comprofesores,

y que por sus actosse

(2)

1^8 BL EtîO

hayan captado de

anteiuano

las simpatías merecidas

desushermanos que

sufren

en

el infortunio

; por-

qneíolo asi obtendrán

un

voto franco

y

decidido

de adhesion por parte

de los veterinarios, solo asi

m llenará de

satisfacción la conlianza generál

en ellos

depositada, principal agente

que

ha de hacer

sus

gesti.ines

puras,

sinceras

y

leales.

ElseñorMariny todos,

debemos

convencernos de que,

faltando

en

los individuos del comité cual¬

quiera de las dichas condiciones, nuestros esfner-

los,nuestras esperanzas, nuestros

sueños dorados^

lodoserá

perdido. ¥mo

Se

diga

que

los electos, bien

que

de conducta anterior perversa y fratricida, ha¬

rtanpara

rehabilitarse

en

la opinion de los hombres

de bienatormentados por su

culpji, todo génftro^de

sacriScios en favor do nuestros

inCoréses

, no;

qtt« elque

fué cínico, ruin

y

jnalvario, únicamente en

lapervt

rsidad

y en

el cinismo buscará constantemente

he^lementosïïe su

predilecta éocisttncia. Hay hombres pfu-atlos cuales la conver.slon es sole una arma trai-

dora^áque

hipócritamente aparentan recurrir

cuan¬

do séven aniquilados

bajo el

peso

de la execración

masterrible; perodecuya arma

jamás harái> buen

«ao. Sihubiese

profesores

con

muchos años de crí¬

menessobresu conciencia,

huyamos eternamente

de ellos: quesu orgaiiiiamon

está mal conformada

paraserun

instrumer lo benéfico; y de seguro que

Budiíatadacarreracu el

vicio ha impreso

ya en su frente hondas huellas que

den á

conocer

cuántos peligrosos

y

traidores planes combina su cerebro'

■Romped, romped, si,queréis, comprofesores.

ei«nc¡ideniím¡ento

de la ligera reseña

que os

liemo,

trizadosobrelas dotes que

deben adornar á los in-

diividiiosdel

cemité

en proyecto;

rompedle

en

ho-

rabueua, y no

temáis

en

dispensar algunas ó

ran¬

chas

imperfecciones para^ensalzar

con

vuestro

su¬

fragio la arrogante presini. ¡ vn de, ios que aspiren á

engalaiiurse con

el título de INDIVIDÜc) DKL GO

Hi'fEVETERINAlU'lv Pero

tened bi

ii presente que no envano se rea.iiuiH

ai lobo ya moribundo

por

la dentellada del iiiastin; lened 'bie

i

preüirite

queno se

hizo sin objeto aquella fábula de la cule¬

brayerta

de trio,

que

estranguló al pastor

compa-,

Sivoique la vivificó

en su-eno.

T si algim díalos

malos, indignarnente

honrados

con vuestra con¬

fianza, cobraran nuevos

lirios

y se pavonearan né-

ciami ntcMirgulliiSdScon

los honores

que vuestra ferttúíxiuii les cotirediesejeiitonces,

comprofesores,

lalveznomprendaisqueen

la forraacio'h del comité

aéterinario

seengeadró el

azote

futuro de la clase;

entoncestalvoz

compirondais cuán funestas

son

cier-

9áearmas enciertasmanos.

Abura bien:uuesira ánimo m ha. sido

señalar

tel ó cnal persona

á,iu pej>rob,iciun dn los-profeso'

Bes, sino

prevenir

una

catástrofe qiosible. Hablamos

a», porque nunca:

hemosconcedidu

uroonceJcremos

«uestro voto àpersonas

de

quienes no nos conste terminantementeque poseencuantas

circunstancias hellas<dejamos

indicadas.

-——s-ss—ss-a—«■■■■&,

Conocemos,

sí, algunos sugetos que reúnen todos los

requisitos

suficientes para ser celebrados

por su brillante honradez, por su notoria buenafé;

mas acaso su sola elección bastaria para que el co¬

mité tuviese enemigos poderosos, tal vezinven¬

cibles

Por consiguiente,

mientras

no se desatan estas dificultades de que

hemos hecho

mérito, negamos nuestro asentimiento á laformación del comité, y aconsejamos lo mismo

á

todos los veterinarios,

ins-

cluso el señor Marin, que, bienlo sabe él, nosme¬

rece una distinción

especialísima.

L. R.

En otrolugar insertamosunaesposicion que dos profesores

han presentado al gobernador civil de

la provincia de

Ciudad-Real,

en

solicitud de

queseles

conceda lainspección-de carnes en los respectivos

pueblos

enque

cada

uno

reside. Ignoramos el

re¬

sultado que

obtendrá la esposieion

; pero

debemos

esperarlo

satisfactorio, sí atendemos á lo

urgente que es para

la salud pública el

que

las

carnes sean científicamente

inspeccionadas

en

los

mataderos; y esta necesidad, hoy tan

apremiante, será,

no lo du¬

damos, satisfechapor

la autoridad á

que va

dirigida

la súplica.

El cólera, esaenfermedad terrible que tantos estragos está

produciendo, ha invadido

nuestra

her¬

mosapenínsula,recorre suscostas

llevando el

asom¬

bro y

la desolación á las mas hermosas y ricas po¬

blaciones, y no tenemos

hora

segura paracontarnos

libres de tanespantoso

mal.

La Ciencia es aunimpotente contra ese

naóns'-'

truo devastador; y únicamente

los

recursos

de <là

higiene

pública

parecen atenuar

los efectos de

su

apaiiciun, ó prevenirla

acaso.

Justo

es, pues, que

se ejerza una

revisión escrupulosa

por personas competentes

sobre las

carnes, que

constituyen

alimentotan esencial, como nocivo si se encuen¬

tranenmal,estado.

Núdvi

espondremos aquí

para

probar

que

á los

veteiinarios es á

quienes directa

y

esclusivaúiente

correspon.le

el exámen de

este

alimento antes de

ser espen

lido al público:

pues que

ni

aun

las auto-

rid.ides mas obcecadasy masenemigas de

los

pue¬

blos quetienen

bajo

su

protección, pueden desco¬

no, crque,

consistiendo el mal estado úe las carnés

enlos daños que les

hayan inferido las enfermeda¬

des durante' la vida de losanimales, y otras

mil

causasestrañasàestásmisrbasafecciones; niaguna. de

esasat\tondadeso.sará desconocerque

el veterinario,

y

solo el veterinario, es quien estudia y conoce esas

enfermedades, y

ésas

causas,

siendo

por

consiguien¬

te elque

éstá llamado á intervenir

en

los mataderos

parael

objeto á

quenos

referimos.

Asi está previstoy

mandado

por,

la ley;

y

úni¬

camente la faltà de ilustraçim.çn

los ayuntamièn7

tos delos

pueblos, ó tal

vez

compromisos especia¬

les quelos unencon

los particulares

que

sofninlà-

tran iasije.ses

pártpel abasto público, han podido dar Ijigar, á

que,por un

abugo de tnasceQ^ucia,

haya estado envenenando mntaraente at vécm-

dario.

lafractíiones

sdmejantes délos preceptos- de lá

higiene

y

de ios maadjtjii.doil.is ordenanzas vigía¬

lessobre lamateria,

serian

en

la actualidad verda¬

deroscrímenes

qúemi ta ñumánida.l ni los gobier¬

nosdebenconseiithf;"-Yhé

áqnípor qué confiaMOS

(3)

DE LA VETRmARIA,

15"9

enqueel

señor gobornaclor de Ciudad-Real dará

una

soluciónsatisfactoria á la cuestión presente,,

én lo

qpé

está

suparte, y por

qué invitamos

con

deci

-

didó

empeño

á todos

losjeterinarios para que imi¬

tenla conducta délos señorés Benitez y

Martinez.

KKiTiivmos.

Sres. Redactores de;MI Eco de la p^eterinaria.

Muy

señores

rnios, espero dé

vds.

se

servirán

insertarestassencillas yhumitdfes

l'neas

en las

bien

redactadas columnas desu apreciable

periódico, si

es quedignas de ello las juzgan,

.quedando síngular-

nitentecomplacido quien por

primera

vez

tiene

oca¬

sión de ofrecersesu atento y &8.

Q. SS. M.

Tomás Museros.

'^Nadie ignora

las

naturales

ventajas

que posee

España

con respecto

á la agricultura

y

la

prepon¬

derancia" que

bajo

esteiconcepto

puede adquirir

so¬

brelas demás naciones.

Ningünoolesconoce la in-'

mensa

superioridad de

nuestro

fértil suelo sobre eb

de-oíros países, en-que solamente la inteligente

aotlvidad del hombre necesitado y

laborioso

es ca pazde hacerlo'producir. Anadiese le oculta'que la'

variedad de climas, todos

beiiignOs,

queofrece la península, laabundancia dorios eandalosos quocor-

ren á confundir susaguas con las saladas del

Medi-

tew'áneo y del

Océano,

la temperatura casi

tropical

dU"nuestras provincias meridionales y la

frescura'

hilbituftl de lasseptentrionales; que estas

circuns¬

tancias; digo, hacen

de

España una

nación'esencial¬

menteagricultora y la dan aptitudpara

obtener

des-

de^QS:fr*tp^.mas estimados' de la.zona tórrida hasta

las maderas de construcción de los paises' del

Norte.

-Y siendo estoasí, habiendorecibido de lanatu¬

raleza tantos beneffciós ¿deberémos consentir

qire

las'dbmás naciones dé eitropanos'aventajen encan¬

tidad y calidad deproiluctos? Soló' gobiernas como los pasados pudieron mirarcon

indifev'éncia cuestión

tanimportante: solo uti

gobierno

ignorantey reac- cronario

pudo abandonar

cotí sangre

fría lá

mayor esperanza

dé'la patriala

qué

ha de

ser

origen dé

nuestra futura

prosperidad.

La agricultura

española

yacepostradaen

el

nías lamentable olvido: encaderiadá'porla rütiua, noapa¬

recedispuesta

á déjar las pernicioláhs prácticas anti¬

guas poruna

organización adecuada á los"

progresos dfe' la ciencia; yentretanto, no solo, los

productos de

prl'mera'necesidad'son poco

abundántes yescogidos,

linoque'Carecemosporconsiguiente dé industriay coThercio, continuando tributarios dél estran-

gero.

Nadie mejor que

los árabes há

sabido apreciar el

valor dfe nuestro sin i^al suelo: tiadíe ha sacado

tantopartido como

ellos de

esta estensa y fecunda mina,cuya riqueza es inagotable en tanto que el

hombresiga'un mediano sistema

esplótacion.

Pe- rSeuandb este sistemaSefá perfecto, cuando estére¬

gido

parios principiés' científicos,

entonces y solo

entonces

podremos formar idea de los inmensos

te- cursosconque

contamos;

entonces y

solo

entonces podrá llegar

España al'grbdo

de

éárgraiidecimientoá

quB-deberá elevarse

algun dra'.

Hábrásonado' la hora d,é nupstra'

regeneracioní,

agrléula,' asi como hemos

arribado,

por

fortunad la;

política?

Así loesperamos

déi'patriòtisiuo, dél'çielò'

ardiénte ysuperîbr ílnstradòndel

gobierno actual.

Yseguramente lapróteccion y

reformas necesarias^

del cultivo y ganadería no

serán

las que menos

ben¬

diciones acarreensobre los hombresqueboy

rigen

los destinos de la Patria.

Entretanto, señores redactores, esperode vds.

que sabrán dispensar las

faltás

ep que

incurrimos

los que por primera vez nos

dirigimos al pdf-

blico. T. M.

Ainslaitcra de los

profesores

que la suscriben da

mescabidr álasiguiente

esposicion.

'Señor gobernadorcivil deciudadReal:

■Dou .Manuel Benítez.'profesorvetrrinariodeprimera clase,promiailoeii ta espresada facultaily subdele.ado da Sanidad delpartido de Manzanares, con fijaresfdení'iay vecindad en la villa de Solana.,y don Tiomás Martine»;»

profesor veterinario de primera clase y suhileiecadode Sanidaddelpartido de Alcázar deSan Juan, con fijaresi- . denrda yvecindad

én

la villa del Tomelioso. á V E. res- peluosaraente dicen: Qlië unode los principa'.cs objeto»., recortiendados á laadministración loesla saludpúfdica;

por lo qu"todavii.«jianeiaeBpocaáfin de cortat líistunes- tas'con,secuencias qiie el menor descuido podria producir yá lasque'podrán bar lugar, cau-"a cuyo couocimienté''

esde lacouipeteuoáa exclusiva de laspersonas queposeen'

la ciencia de la vetep^aria.

•Conformeájésle innegable principio; el gobierna don S. M. noha podidomenosdetenerprescrite ensusdlspqe, sicioiiestanimportante objeto; dispensándoleel

cuui^ado

y protección (juo laude justiciumerete. Asi es que

W

el

Real decreto dei9 de febrero últrmo^ al sefialar en su"

articulo 1$. las fa 'ultades de losvi-terinaños deprimera' clase, cpuipreudij en ella la de inter,yeuir,eu.loscasosde

entermcfladéscontagiosas, policía

s;tjiit

ina, y datermit..

napdo en su

cousecuéncia

quesolo

sé'grpyepraii.éq.prpí

fesoresde esta clasedas plazasde visifadóres, inspecta-

'

rés, peritosy

tiluhirés délos

pueblos; '

'"•La administraoionprovincialy

Ibéal,

'ciiyá"priiUífá obligaeíon es secundar las' benéficos'pettsantiéniós'del gobieriio do

S. M., debe tomariodás

las" dispos'iciouCs*

que

seaa-necesarias

paraeste

fin;

entre ellas lo es muy

priucipalpieJito.a

de

nqinbrar iusppetoree, peritos, titula¬

res en IjOS

pueblos,

para que recoiiozpan las carnes que enellos s;consií'man, y evitende esAa.mancra las.çausasi

qúé podriin producir enf«nWçdàdesébritagio'sas,

queafec¬

taránfutreslamenieá'lasaliiilpünlica.

B'átóS' nombráinientus, cuya utilidad é importaUciV

sontannotorias, deben recaer esbUisivameutU'seguu eï'' cilado'Real decreto enveterinarios de primera ciaseco¬

molos que

suscriben. En, la,

villade MaiKanaresexiste uttt, inspeclcr

destinado

á este

olyeto;

conla notable circuns»

tanda de no ciTriespoquerá laenunciadaclase, lo>inbii49^.

debe'exislirenIbá demás pueblos, sihan dejpalizarselaf- saludables intencionesdel gobierno de S.

M',"

y eníá ac- tuálidadcon mas poderoso, motivo, par la- circunstancia

especial'íde haber invadido algunos puntos del reinoiell.

■celera avorbo,»ydeber adoptarse todo género de jirecaurO cjquespara,evitarsnpropagácion tanfunesta coino.ileso-:

lailora;,y:pára que

asi

so

verifique

en

las

villas de

Solaoa,

yTomelliiso, unas de

las

priiiieras déla provinciapor su numeroso vecindario', los (|uususcriben acuden á V.

K

por

considerarlo

un

deber'de

su

profesión

y

cargó:

ea ^ virtud*,

«AV. E. suplican isai

ssryaiaidopdar

las disposi'citméfr' oportunospara quetenga;

fecto.cl indicado nombrámtea-

tode.inspectordecarnes,'tantoen,

las citadas villas,

citsnl"

no enlas domas, de luprovinciaque V. E.juzgueconve- nieiite, dirigiendosi

necesario fuese-para

ello ordeuper-;

ceptivaá los

ayuutamieaiós; asi lo

esperan

de la rectitud,

yceloq'ie á

Vi E¡'. dtstingnéti dësde el'

momento qúe sé;

encargóen

lá admiñistrácion púuiica de

esta

provincial '

•Dios

guardé

A V. íí. m'iiehos aSos.—Solana 19 diei agosto det

1854;—Maímel

Benitez.—TVimásMartine».»

QÜHRÏCA APLICADA'.

DelJÍMíteií demtdeoine vétérinaire tomamòs;Iw srguienlBs^tnactos de Ipes notables trabajos qae*

(4)

!60 EL ECO

acercade los trigos han sido presentados sucesi-

Tamenteà laAcademia deCiencias deParis, hace poco

tiempo:

.

Composición

de los trigos y su

clasificación;

por H» Millón.

Antes de las

investigaciones practicadas

por

Mi¬

llónen estosúltimosaños,y cuyos

resultados acaba

de someterrecientementeàla Academia deCiencias,

eramuy débil ladiferencia establecida entrelostri¬

gos conocidos enel comercio con lasdenominacio¬

nes dedurosy tiernos. Laopinionmas

general

entre

lossabioscomo entre losagricultores, era; que la consistenciamayoró menorde losgranos,

invocada

comomedio deapreciación parael valor

de los

tri¬

gos,solo constituia un carácter vago

indigno

de qar seriamentela atención.

- Lo mismo sucederiaenla actualidad , si dicha cualidad hubiera de continuar, como hastaaqui eternamente aislada; si no representara

al espíritu

otra cosaque la propiedad física que

indica;

si,en otros términos, no espresara mas que

el sentido lexicológico

de los gramáticos. Pero adquiere una titaimportancia, cuando ásu

significación intrínse¬

ca

acompaña

la de lacomposición química; yesto acaban de demostrar los últimos trabajos de M.

Millón.

Los análisisque viene practicando

desde 1848

con harinas de diversas procedencias le han

hecho

ver que hay trigos de lamejor

apariencia, cosecha¬

dos y conservadosporcultivadores cuidadosos, que producen, sin

embargo,

cantidades muy

variables

de gluten; y noseria estraño, según este

hábil quími¬

co, encontrar harinas que no contuviesen vestigio alguno. Este hechonotable les ha sidocomprobado

en laArgelia ensayando

trigos tiernos

recolectados por uncolono de Guyotville:unacantidad de trigo, compuesto de grano de las mejores aparienciasy de un volumennotable, ha suministrado unaharina que, en vezde gluten, solo ha

depositado

en un ta¬

mizmuy

fino

un4,0 por 100de unamateria secay friable. Sin embargo, la

proporción de ázoe

era bastante grande y

correspondis á i 1,5

por

100 de gluten

ómas bien de

principio albuminóideo.

Semejante

resultado, que

M. Millón ha visto

re¬

producirse muchos años seguidos, tiene

una gran

significación,

y pone en evidencia, deuna manera concluyente,la existencia detrigos enteramente

pri¬

vadosdegluten.

Pero no esesteel solohecho importante

hallado

Eor

ahecho

M. Millón

constar

en sus

también que

interesantes investigaciones;

hay

harinas

muy

fres¬

cas, de los mejores caracteres, obtenidas por una

■aolienta perfecta, qne

contienen,

encasos

conside-

xádoscomo

excepcionales

pero que

tal

vez son muy

frecuentes,

una proporoion

de

glutenque

desciende

íT,8 y 9 por

lOO,

siendo

así

que en

los trigos Irán-

ceses varía entre 11 y

15

por

100, término medio.

Estedatopuedeserde la mayor

importancia

para elexáinende los

trigos. Bfectivament'^, dice M. Mi¬

llón, en losañosde coseciia insuficientehay natu¬

ralmente mas

empeño

en

las

tentativas

de sofistica-

cionde lasharinas; yentonces,

añade, si los peritos

debenredoblar su

vigilancia,

es

necesario también

quesus conclusionesse funden sobre todos los he¬

chos'adquiridos

por

la

ciencia yla

esperiencia.

Otraventaja se refiere además á esta

distinción

de

trigos

ricosy

pobres

en

glútea; ella

ensenaque lasharinasque contienen una gran

proporción de

«te

principio

inmediato soportan con

facilidad la

adicióndélaharina demaiz, de patata

ó

de

cualquie¬

ra otrasustanciafeculenta, lo cualnosucederia pro¬

bablementecon lasotras harinas.

En fin, M,Millón ha hecho pan con harina de trigo sin gluten, y hanotado entreotras cosas, que, indipendientemente de las dificultades que ofrece

su elaboración, se detieneen cierto modo enla gar- banta al

deglutirlo, á

lamaneradelpan muy seco y duro.

M. Millón concluye

de aqui que el gluten contribuye sin

duda

á hacer resbaladizo el bolo ali¬

menticio, lo cualesplica diciendoqueelpansin glu¬

ten absorve muchasaliva, el ordinario menos, y me¬

nos todavía el de

trigo duro.

Según esta

rápida

ojeada, vesecuantovalor ad¬

quieren hoy

las denominaciones

casi insignificantes

enotrotiempo, conlas cuales se designa lostrigos

enel comercio. Los

trigos

duros son muy ricos en

gluten,

los

tiernos carecen de él 6le contienen en

proporciones

mínimas, ylossemi-duros guardan un término medio.

En eldia, los caracteres sifministrados por

la

composición de los trigos, ó para hablar con mas

precision,

por la proporcióndegluten que contie¬

nen, constituyen un dato tan exacto y constante,

que

M. Mdlon

no duda proponer enla clasificación comercial de estecereal, las distinciones consagra¬

das por

el

uso

de trigos tiernos,

y duros escluyendo

lossignos botánicos queantes invocaba. Ademas de

estasdos categorías,M. Millón admiteuna interme¬

dia, los trigos semir-duros, que casi seconfunden

conlos duros.

Por último, como complemento de estas tres distinciones

capitales,

aconseja que se tengan en cuenta el volúmen, el color de lostegumemosy

el

sulco de los granos.

Nota sobre el

principio digestivo

del salvadode

trigo;

por

M. Máuriés.

Puede estraerse el

principio

digestivo del sal¬

vado en tres estados diferentes; i.° en el estado so¬

luble; 2." modificado por la

precipitación

; 3.°mo¬

dificado por el calor.

Para obtenerle en el primer estado, aconseja M. Mouriés hacer macerarsalvado menudo en diez partes

de alcohol del

comercio, dilatado en dos ve¬

ces su volumen de agua, yprensarle

despues.

Esta

operación

debe renovar-set'es veces, conel

objeto

de desembarazar el salvado de la destrina ydelazú¬

carquecontiene,por laacción disolvente queejerce elalcohol débilsobreuno yotro

principio.

Paraseparar el

principio

digestivo que

continúa integralmente

en el

salvado,

se coloca esteúltimo

en cincopartes

de

agua destilada por espacio de

media hora, sele esprime

despues,

y

el líquido

re¬

sultante sefiltra y somete áuna

evaporación

mode¬

rada, á 40° centígrados.

El principio digestivo delsalvado de

trigo

en

el

estado seco es amorfo, análogo, á la albúmina, so¬

luble enel agua, insoluble enel alcohol,los éteres y

los

aceites;se coagula por un calor de 15° ó por

esceso de calor. Los ácidos minerales ú

orgánicos

le

precipitan

encoposcaseiformes, y,

cuando

estan concentrados, no tienen acción sensible sobre la disolución.

'Pero la

propiedad

masnotable de este

principio

es de trasformar en veinticinco minutos diez granos

de

almidónen unajalea

completamente aná¬

loga al engrudo, á la do^is de cincocentigramos y á unatemperatura de 45°, en

Ío

cual se diferencia de todos los albuminóideos.

Precipitado

porun

ácido,

obraestemismocuer¬

po con mas

lentitud

sobreel

almidón

y no

lo trasfor-.

(5)

DE LA VETERINARIA. 161

ma en engrudo sino al cabo de

seis horas de

con-

1

tacto. La presencia deun ácido

ó

de un

álcali

no cambiaes eresultado ni snduración.

Coaguladopor el calor á

75°,

se

hace insoluble

enlos ácidos y los

álcalis, conservando

no

obstan¬

te la

propiedad

de

obrar sobre el almidón

como en elsegundo caso, despues deuna

acción prolongada

de seis horas.

Si laesperiencia en

grande

y

la práctica vienen

á dar al descubrimiento de M. Mauriés la sanción de que carece

todavia

,

el principio digestivo del

salvado merece fijar la atención

de

los

veterinarios

y criadores' la

zootecnia podrá utilizarle

conventa¬

ja paraprovocaruna

asimilación

mayor

de

sustan¬

cias alimenticias, porejemplo, en los casos

de

ce¬

bamiento; y la

terapéutica tendrá

con

qué ayudar

las fuerzas elaboratrices del

estómago cuando los

animales están débiles como enla convalecencia.

Pero, lo

repetimos, solo la práctica podrá medir

con

justicia

el

valor

de este

descubrimiento.

Influencia del lavado de los trigos sobre las cualidadej

delsalvado, déla

harinay del

pan;

porM. E. Millón.

El trabajo que

bajo

este

epígrafe ha presentado

M. Millón á laAcademia de ciencias ofrece, el mas altointerés para

la alimentación pública

y

á la hi¬

giene en

general.

Cuandose

sumerje el trigo

en agua

durante cier¬

to tiempo y se

le desembaraza

por

el lavado, de

todala suciedady

materias estrañas,

se

obtiene

un salvado estremadamente lijero, cuya composición

química difiere

en un

todo de la

que

presentan los

salvadosordidarios. Muchomenos rico que ellos, solo da alanálisis la mit >d de las materias grasas y delosfosfatos alcalinos contenidosenestosúltmos,

mientras que

suministra

una

proporción doble de le¬

ñoso. Su

pobreza

en ázoe es

todavia

mayor, pues

no contienemas que

vestigios

por

decirlo

asi. ,

La razón de estadiferenciaesfácilde dar. Los sal-

vapos

antiguos están formados de dos películas uni¬

das entre si: la

película

estema,

leñosa, inerte, órga¬

no protector

durante la vejetacion,

y

la película in¬

terna. debida é lacapa superficial

de

la almendra,

en la cual sehallan concentradosel ázoe, fosfatos alcalicos, lagrasa, la

esencia ó

aroma

del

trigoy el

Srincipio

leuries. Los

digestivo

salvados procedentes

del almidón indicado

de

trigo por

hume¬

M.

decidosoloconstan de la

película

esterna, y

á

losu¬

mo deuna corta

porción de la interna.

Ateniéndonos á estos datos podemos darnos

cuenta confacilidad del gusteagradabley acción nu¬

tritivamas

pronunciada del

pan

fabricado

con

hari¬

nasmorenas, asi como de su mayorrendimiento.

La causa se encuentraen la presencia indudable de

un gran esceso

de principio digestivo,

de aroma, y grasa.

El aroma sobre todo se desarrollatan notable cuandose lava el trigo antes de molerle, que algu¬

nas personas

á quienes M. Millón habia

hecho co¬

merpan elaborado con harinas

privadas

solo de la

película

esterna

del salvado, le

acusaron

de haberle

aromatizado artificialmente.

En fin,añade M. Millón, la

simple hümectaciou

del trigo basta paraaumentar el producto de la ha¬

rina en la

proporción de

5, 10 y aun 15 por

100.

Este secreto, conocido haceyamucho

tiempo,

pero

inesplicado antes del interesante trabajo deque

da¬

mos estorápida reseña, habia sidosiempre lapro¬

piedad

casi hereditaria deun corto número de au¬

tores, quehacian de él un gran misterio. M. Millón

penetrandole

y

vulgarizándole

en

seguida, ha hecho

una cosaútil que

todo, el mundo está llamado á

apro¬

vechar y que no

dudamos

se

le agradecerá

por

todos.

Hayen estosbellos

descubrimientos

una garan¬

tía casi segura contrala escasez

de los

años

malos,

que

debe

disminuir

mucho los

temores

de las

cose¬

ches insuficientes.

Los trabajos

de MM. Mouriés

y

Millón tan

re¬

lacionados entre si como se ve, se prestan mu¬

tuamenteapoyo yprometen

resultados

que

apetece¬

mos verrealizados cuanto antes.

PATOLOGIA Y

TERAPEUTICA.

Estudios

prácticos, investigaciones

y

discusiones

sobre la castración de las vacas, por

M. Pierre

Charlier,médico veterinarioenReims

[Francia].

(Traducción de D.Domingo Ruiz Gonzalez, veterinario de

1."ciase).

(Continuación).

2. ® La castración favorece

el

engrasamiento

de

las vacas.

Lacuestión del engrasamiento

de las

vacas es

de

lasmasimportantes

de economía rural,

con

relación

á los interesesgeneralesy

particulares

;porque,

asi

comolosbueyes,que s' gun

la estadística oficial del

gob'erno, componen poco mas

déla cuarta parte

del

ganado

vacuno

adulto, las

vacas

proporcionan

al consumo una abundante cantidad de carne,

al

comercio, sebo y cueros y

á la tierra mucho abono:

con la diferencia, al presente, que estos

productos

enlasvacas, seobtienen

ordinariamente

con

mucha

dificultady

muchas

veces son

de calidad inferior.

¿Yesto por

qué?

M. Magote, en su

tratado de higiene veterinaria

aplicada, nos

dá la

razón

de ello; «Si la

carne

de las

«vacas espoco

estimada, dice, consiste

en que

el ma-

«yor

número de

casos, no se

las

engrasa

hasta que

«sonviejas,

apuradas

por

la lactacion«

«Las vacas queno

dan leche, continua

mas

ader

»Iante, si están bien

alimentadas tienen los órganos

«genitales

escitados activos,'desean el macho y en-

«gordan diiícílmente.»

Sabidas estas causasno

busquemos

otras,

No obstante, M. Mague

pódia haber añadido

que

.en lasvacasque dan

leche,

come en

aquellas cuya

secreción está

suprimida cuando

se

las ceba, los de¬

seos delcoito sedesenvuelvenigualmente y

producen, el

mismo

efecto. Es

un

mal interior

que,

si no destruye

la vida ensu

principio,

corroepoco

á

poco

las mo-

liculas orgánicas,como

el orin

corre

al hierro.

Lavacaquese

calienta frecuentemente, produ¬

ce pncojy

mal sebo

;

sucumbe en el matadero roja y

ligera, como

dicen los carnic'eros. Su carne, que no

tiene grasa,

ni

jugos

nutritivos,

es

dura, seca, fibro¬

sa, difícil de

masticar

y

de dijerir; ó bien es pálida,

amarillenta, blanduja,

viscosa: cuando la

res

está

tranquila, adquiere alguna gordura en diferentes in-

térvalos y se

aprovecha este momento para sacri¬

ficarla.

Deesto

procede la mala reputación

que

tiene la

carnedevaca en la carnecería, en

donde todas ellas

sonbueyes,

así

como

la repugnancia

que

tienen los

cultivadores y

cebadores

en engrasar

las hembras

vacunas..

Castrándolas, no sucedería esto, porque sena destruirlacausa maspoderosaqueseopone

á

suen:

grasamiento. Diré

mas, en

muchas localidádes, se-

(6)

162 Et ECO.

rian preferidas álosibueyes para engordarlas,por¬

que cuestan menos, son mas_

sobrias,

se engrasan

maspronto, dan mas beneficio, ypuedenser.vendi¬

das mas fácilmente, sobre todo en estío, á ios car¬

niceros de mediana fortuna, que no los

bueyes

de gran peso.

Considérese, en efecto, el enorme^gasto que ne-

«csita.ei engrasamiento en el establo! Calculé el cultivador que se dedica á esta industria eicoste de los alimentos de sosten yceboj.veráquele es

impo¬

sible realizar los beneficios quetenias derechoáes¬

perar

de

su

trabajo

ydel capital empleadoen la ad¬

quisición óen la cria "dééstosaai males.

Si á faver deunoultivo

perfeccionado, produjé¬

ramos una cantidad mayor de plantas

forrajéras,

podríamos indudablemente, á imitación de nuestro vecinos de ültra'Mancha dedicarnoscon masVenta- cebo

délbuey

; pepo con nuestrosdéttiles-re-

'

cursos del momento, sostengo que esta industria

esranchasvecesimposible paralos cultivadores en

pequeño

y

siempre

onerosa.

Grognier, uno denuestros mejores observado¬

res, dice, en sucursode

multlfylicacion

de los anima¬

les

domésticos,"çn

laIjrescía

(Francia),

los.ce- badores

distribuyen dîàriamente

á susbueyes en cebo 15 á

'?0kilógramp3 d§ fqrrages

secos, 10

kiliS- gramosde

patatascocidaá, é igual caittidad.de

hai^j

na mezclada con sálvadéVM'Nó se puede engoirdár

con menos,

à

pesar delo que

han dicho

algunos cè¬

lebres agrónomos;

porqué

eu

nuestra" Champaña, dohde.unode

ellos es grande ecónomo, es concorla

difereiiçia

lo que se da á'los

bueyes

de cebo;y Iq.

ioiret,

à,esta deLilla, refiere quéenloscampos

próximos

ciudad, la ración diaria de un

buey

en cebo

equivale á 8

yhasta 9

kilógramos

por

100

del peso

del animal envivo. ,

Luego esta cantidadde alimentocuesta eyiden- temente mas de 2 francqs por

dia,

y

el.prddiicto

que

obTíérie

no

puede

ser evaluado eii mas

de 1 franco 20 céntimos, precio elmas elevadodej

kilógramo éi

gastode ládepaja

carné'que empleada

puede haceren lacamael

buey

eqúivaleal, dia;al producto

del

éstiercol.

Leyendo también los

Anales

de

Roville,

publica¬

dos porMathieu de

Dojnbaslp,

se ve

palabra

per- didadecebo.repetida

cada añb

enel

arjícülo

de

.|os tjueyes

Esto haceque,á'Reaaf dé iés prepaioa decsíimu-

Iqqneel gqhierpoy las aociedaqes ^é

agricultura

4islíibuy(ea todos los años

á los quese.dedican al

engrasttmieíitp,,,qps, y»|i(p.5i#li;gadps,.,tQda,y,ia4

cjirrir al

eMrangero,

para

abastpcpraos,.

de. p¡f,i;pp.,

tan

exigug.j¡a,.qp JFrsfiCia,

Paraqué

pl cultivador

seentregue con mas aía»

all engrasamiento de, las reses, es necesario >que cuentecon otros4)roduptos que le indemnicen de sps gastosy,de sus cuidados, Es, preciso que

.baga tpahajar

á,sus novillos

b¿sta

el momento de poner¬

les.e«.cebo- ESfP^cesario

que, con

ayuda

dedajcasr tcapiqn,

obtenga de. la

vaca á la ve;^,,

leche

y carne.

Estesedstf,á,miparecer, «qo delos

principales

medios de disminuirel preciode la carney

favorer

cersuuso.

Recibe efeotivamentela'vacacastrada elequiva¬

lente dealimentoempleado par»el

buey (tesoebo,'

y pormediana lecheraque sea y de regularconstitu¬

ción, evidentemente engordará y proporcionará' 10 litrOT delechealmenos,popdia, ó sea3.050 litros aiano>que*vendida:en naturaleza convertida en

manteca'óiqueso,

compensará

siempre

los gasto» dé

sosten y alimentación

disminuyendo

asi el precio

quevienen á costar.

Concedo 10 litros de leche aldia, minlmunpara lasbuenas lecheras quereciben ,1a cantidad de ali¬

mento indicada anteriormentepara engordâr á los bueyes. Admito sin

embargo

esta cifra como térmi^

nomedio,porque si enel primer año las vacasqne han sufrido la operación d.m algunas- vecesmucho

mas, enelsegundo, ouairdo' la secreción grasosa,

predomina sóbrelaiactea,

disminuye

masó menos, según que elengrasamiento es mas prontoy perfec¬

ta. Peroen laslocalidiades dondeno

bay

costumbre detenermuctia leche, algunoscriadores'se sorpren¬

derán quizá del trabajo yembarazo que este pro- docto lesdará,añadido ai de. unengrasamiento sim¬

ple. Me apresuroádarles confianza. Viendo los be¬

neficios,

bien pronto desistirán de esta objeción,

queipor otra parte puedereducirse á nada estable^

ciendo queserías de asociación, por destilo de las queexistenya en las montañasdeSuiza, en todoel pais de Vaud, el

Franco-Condado,

eu la Brescia, en

gdnaite.Ríoptfrcionamgfaodes

ventajasj

Yno;SQ!diga que habria) SHpouabundancta de lèv

qlie,

de mantecay quesoy dificultad en dar salida á

est,bs productos,

porque lalèche es el

priméro

,y

uno de nuestros

mejores alimentos;

la mantecasir-

■vé para sazonartodosnuéstros manjares y el que's'ò

forma parte del alimento del pobre cómo del rico.

En muchas anmarcas deFrancia, la fabricación 'deza manteca y queso esinmensa, constituvela rique¬

dcljiais,!

y no

obstante

nos es necesario importer

cada ario prodigiosascantidadesde la

Gran-Brétañ»,

deBélgica , Holanda,Italia, Suiza, Atemania, etc, y muchaspersonas no consumen todavíaiainitamd»

lo que'desean,

Nunoa sedebe temerproducir demasiadocuando

sonicosasútiles,cosas deprimera necesidad; que si el valordeestosproductos-

disminuye

en razónde su

abundancia, todavía quedara él productormas proi-

vecho que por engordar á los bueyes, los que en -nuestropaisestán dé fi mesésfinasenelestabto

sin dar

ningún, benefcio.

La leche eshasta ahora el alimento que mejor

conviene para engordar losterneros, crhr-ios lecho'- nes, y;estees unrecursoparalesqueseparadosde las ciudades, no pueden vender la leche ennaturaleza jüno quieren dedicarse á ia fabricación del queso«y

manteca', . '

La

cuestioii'.del''engrasamiento

de las' vacas ««

putSiuna-do lasmasimportantes de la eèonomia-rural

restaprobar

ahora'que

la-castración fiivorece este

eugnasamiento.

Seibadlegado

á negar esto.

Cómo.responderá osla

asercion'qne

es

complétd-

mencecontraria á las leyes de ia

fisiología,

y á les

mil ymil hechos observados desde los

tiempos

mas remotos? Es-eiiteramente lo rriismo que negar que el

buey

SO: engrasa

mejor

y mas fácilmente que-el

toco..

En todosdos-animales,

cualquiera

que sea su

sexo y su raza, la castcacion

dispone'

al' engrasai- miento; ella sola no ledetermina sin

daday permie

favorecepoderosamente, ysi

algunas

vecesven animales castradosque no engordan, esto consiste

Busujeanfórmacion,

naturateza; idiosincrasia', edkld,

«stario de salud, modo de tratarlos y aliinentár- los, etc.y noenlaoperacioni

fiajo

la

influencia de

la castración^, lavida seitual

desaparece;

los deseos del coitose

eslingúen. la sensibi-

lidadlse embota;

latcireulacion^languid'oe,

la

erten^ia

mtscàlar

dismitntye; íostejiéit

se-rebajan;sehacenmas

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