En la coloniaagrícola de los Sres. M. Heredia y hermanos, de Málaga, se acaba de dar un gran paso de adelanto en el cultivo, puesto que tienen funcionando en dichas tierras aparatos de culti¬
vo á vapor, quehan importado de laacreditada yconocidacasade los Sres. J. y F. Howard, de Bedford, Inglaterra, por mediación
desus representantes en Andalucía, los Sres. Heaton y Bradbu¬
ry, La Esperanza, Málaga.
Los arados de vaporconstruidos porlos Sres. Howard, seintro¬
dujeron en España hace algunos años, y desde entonces hemos visto funcionar otros aparatos y máquinas cerca de Cádiz; pero el aparato de que ahoratratamos varia materialmente de todos los
demás, por sermás sencillo, de ménoscosto y demás fácilmanejo.
Los Sres. Heredia escogieron el aparato de los Sres. Howard,
porque reunia las ventajas antedichas con la depoderlo emplear
en combinación con una locomóvil, que ya tenian, y que en años anteriores les habla servido para regar sus tierras; y los resultados
han sido completamente satisfactorios, probando de una vez su
buenjuicioylaexcelencia del sistema de Howard.
Algunos de nuestros lectorespodránpreguntar quéventajas van á conseguir con introducir maquinaria más ó ménos costosa para labrar nuestras tierras á vapor, fundándose en que, como nuestros abuelos hablan podido cultivar con el antiguo arado de madera tirado por bueyes, nosotros no tenemos necesidad de seguir otra senda.
En contestación á tales preguntas, diremos que la agricultura española tiene á lafuerza que adelantar, y tenemos que emplear
los mejores medios á nuestro alcance para extender la fertilidad y
recursos de nuestro país, si hemos de competir con los
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res extranjeros, que están siempre deseosos de mandarnos granos y azúcar en cambio de nuestro oro; ysi queremos surtir nuestros
mercados de losartículos indispensables de consumo, áprecio más
módico del que pueden mandárnoslos desde Marruecos, Rusiame¬
ridionalylos Estados Unidos de América.
ADELANTOS MECÁNICOS EN AGRICULTURA I37 Elantiguo arado de madera, que no hace másque unsimulacro
decultivar latierra, se estáya sustituyendo porotros arados más
modernos yde másduración, construidos la mayor parte de ellos
de hierro y acero, en vez de madera.
ADELANTOS MECÁNICOS EN AGRICULTURA I39 La experiencia ha probado que la fuerza motriz de vapor es la
más económica, y en las fincas grandes debe hacer todo el trabajo
<le trillar, arar, elevaragua y regar, moler trigo, etc., con más
motivohoy, cuando las máquinas perfeccionadas permiten consu¬
mir como combustible laleña, raices, paja, bagazo, etc.
Lasventajas de arar ávapor se pueden resumir en que la tierra
se puede labrar á cualquier momento y en las épocas más á propósito,
■con más rapidezque conlos bueyesyanimalesy á más profundidad; pul¬
veriza más eficazmentela tierra yhace más completasufertilidad,por dejarla mejorexpuestaála influencia de la atmósfera; la humedad tam¬
bién se conservamásentierra labrada ágrandes profundidades, con bene¬
ficio de las cosechas.
Ahoradaremos una descripción del aparato que hemos visto
Fig.22.—Vista de la iná^uma empleadaentrasportarel arado de As A Traction Engine.
funcionar en la colonia agrícola de los Sres. Heredia, cuyatierra
es muy arcillosa, y despues de las fuertes lluvias, en Marzo, ha quedado sumamentedura.
Un arado de vapor, como el del grabado, se veia arrastrado por medio de un cable de alambre de acero, de un extremo á otro del campo, una distancia de unos 340 metros, y cada paso abría de
lamanera más perfecta tres surcos, cadauno de 36 á 40 centíme¬
tros deancho y unos aS centímetros de profundidad, bastandoun
hombre sentado en el mismo arado para guiarlo.
A cadaextremo de los surcos se hallaba una máquina llamada
Anclaautomática, parecida ála del adjunto grabado, sobre la cual hayuna polea acanalada en que trabaja el cable del arado á la máquina. El ancla tiene cuatro discos que penetran en la tierra y
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resisten la fuerza de tracción, y sobre estas mismas ruedas 6 discos, por sí sola, se mueve duranteel trabajo, sin necesidad de
las dos ruedas grandes, que entonces se quitan.
El cable pasadeestas anclas áotro ancla fija con polea, colo¬
cada á alguna distancia, yde esta ancla á la máquina de vapor, detrás de la cual hay colocado un molinete portátil de dos "tambo¬
res, que, como se ve porel grabado, puede aplicarse fácilmente á cualquiera clase de máquina locomóvil, pudiendo los agricultores
y propietarios emplear las que hoy tengan para cultivar sus tier¬
ras, con añadir solamente maquinaria como la de los Sres. Here¬
dia, á quienes ha venido á costar unas 10.000 pesetas puesta sobre el muelle de Málaga, libre de todo gasto.
El sistema de colocar el aparato y de arar se ve en la figura21, yá los que quisieren más informes, les referimos á los antedi¬
chos Sres. Heaton y Bradbury, de Málaga, que no dudamos po¬
drán facilitar todos los datos que se desee y catálogos ilustrados
de este aparato.
Dentro de poco esperamos tener el gusto de dar á conocer á
nuestros lectores un sistemanuevo y privilegiado de arar por me¬
dio de una máquina locomotora en vez deuna locomóvil, sobre la
cual tiene laventaja de poder andar sola y de no necesitaranima¬
les paralos trasportesde un punto á otro del arado, cables, etc.