RESUMEN
CONCLUSIONES REFLEXIÓN
RESULTADOS Metodología
El trabajo doméstico no remunerado, se nos ha mostrado a las mujeres como algo inherente a nuestra biología femenina y por ende, que es una labor que obligatoriamente debemos cumplir por naturaleza y no que hace parte de una serie de transformaciones en el proceso de reproducción de la fuerza de trabajo en el sistema capitalista. Investigadoras como Silvia Federici han realizado una relectura del sistema capitalista para comprender que, entre la
diferenciación del poder masculino y femenino, supuestamente biológico y natural, se esconde realmente el trabajo no pagado de las mujeres y el uso de su fuerza de trabajo como «pilar en el cual se construyó la explotación de los trabajadores asalariados».
Encuesta sobre el uso del tiempo que hombres y
mujeres dedican al trabajo doméstico no
remunerado.
ANTECEDENTES
La pandemia de Covid-19 y los confinamientos sucesivos nos han empujado a enforcarnos más en nuestros interior en todos los sentidos de la palabra.Ya sea en nosotros mismos o en nuestros hogares, todos hemos sido invitados, de buena o mala gana, a observar lo que sucede dentro de nuestras paredes. Por ejemplo, se nos informó sobre la violencia contra las mujeres, las desigualdades de género que persisten a causa del patriarcado, la distribución de las tareas domésticas dentro del hogar, entre otras cosas. De hecho, aunque las mujeres han hecho progresos en los últimos decenios, todavía queda mucho trabajo. A pesar de su integración en el mundo laboral, muchas mujeres asumen la mayor parte de las tareas domésticas y permanecen confinadas en el papel de ama de casa.
Cuando se observa la distribución de género del Tiempo Total del Trabajo (TTT) está claro que las mujeres dedican la mayor parte de su tiempo al trabajo no remunerado (67%) mientras que los hombres dedican el 28%. El 69% del tiempo de trabajo de los hombres se dedica al trabajo en el mercado,
mientras que para las mujeres el porcentaje es del 31%. Es evidente que las mujeres dedican más tiempo al trabajo no remunerado en el hogar que los hombres.
En el Trabajo No Remunerado de los Hogares (TNRH) se ve que las mujeres asumen una gran parte de las tareas domésticas con un trabajo arduo en el hogar como la limpieza y la preparación de alimentos.
Mientras que el hombre pasa en promedio más horas en tareas que requieren menos esfuerzo.
En México, 5 de cada 10 horas de trabajo no remunerado contribuye a la economía del país. Si vemos que parte de este trabajo es realizado por mujeres, esto pone en evidencia la importancia de las labores domésticas para el funcionamiento de la economía.
En cuanto a la distribución geográfica de esta realidad, desde el razonamiento lógico, podríamos suponer que en el medio urbano, las distribución de las tareas del hogar son más equitativas en comparación con las zonas rurales. No obstante no existe una diferencia estadísticamente significativa. Puede ser que si bien las mujeres urbanas hagan parte del sistema laboral, continúan igualmente a ocuparse de las labores del hogar.
Bibliografía
INEGI, Encuesta Nacional sobre el Uso del Tiempo (ENUT) 2019. Instituto INMUJERES.
Consultado en: https://www.inegi.org.mx/programas/enut/2019/
Iconoclastas. Manual de mapeo colectivo: recursos cartográficos críticos para procesos territoriales de creación colaborativa. Consultado en: https://iconoclasistas.net/4322-2/
Federici, S. (2004). Calibán y la bruja. Mujeres, cuerpo y acumulación originaria (Ed. rev.).
Madrid,
España: Traficantes de Sueños.
